El Papa en la fiesta del Bautismo de Jesús: Pienso en las madres de los soldados muertos en la guerra
En el Ángelus, el Papa volvió a recordar a "las madres ucranianas y rusas" que están pagando el precio del conflicto. En la Capilla Sixtina administró el sacramento a 13 niños. El pontífice recomendó a los padres y padrinos que les enseñen a rezar desde pequeños y a recordar cada año la fecha de su bautismo.
Ciudad del Vaticano (AsiaNews) - “Cuando veo a la Virgen con el Niño en brazos en el pesebre, amamantándolo, pienso en las madres de las víctimas de la guerra, en las ucranianas y en las rusas que han perdido a sus hijos soldados: ése es el precio de la guerra”, dijo hoy el Papa Francisco al final del Ángelus, en la fiesta del Bautismo de Jesús. E invitó una vez más a los fieles a no olvidar a "todos los hermanos ucranianos que sufren tanto por esta Navidad en guerra, sin luz, sin hogar".
La jornada del Papa comenzó en la Capilla Sixtina administrando el bautismo a 13 niños, hijos de empleados de la Santa Sede. En la breve homilía que dirigió espontáneamente a sus padres, el pontífice les dijo que este día “es como un cumpleaños, porque el Bautismo nos hace renacer a la vida cristiana. Por eso les aconsejo que enseñen a sus hijos hijos la fecha de su Bautismo, como un nuevo cumpleaños; que cada año se acuerden y den gracias a Dios por esta gracia de ser cristianos”. Invitación que luego extendió también a todos los fieles en el Ángelus.
Recordó entonces la tarea que corresponde a los padres y padrinos de acompañarlos en el camino que comenzó con el Bautismo e invitó a enseñarles a rezar “porque la oración es lo que les dará fuerza a lo largo de la vida: en los momentos buenos, dar gracias a Dios , y en los malos momentos, para pedir fuerzas”. Rezar sobre todo a la Virgen: “Se dice que cuando alguien está enojado con el Señor, o se ha alejado, la Virgen siempre está cerca para abrirle camino para que pueda volver”, añadió.
Al mediodía, antes de rezar el Ángelus en la Plaza de San Pedro, invitó a reflexionar por qué Jesús se mezcla con los pecadores cuando va al lugar donde se encuentra Juan el Bautista para recibir el bautismo. “A orillas del Jordán - comentó - Jesús nos revela el sentido de su misión: Él vino a cumplir la justicia divina, que es salvar a los pecadores; vino a cargar sobre sus hombros el pecado del mundo y a bajar a las aguas del abismo, de la muerte, para rescatarnos y no dejar que nos ahoguemos. Nos muestra que la verdadera justicia de Dios es la misericordia que salva, el amor que comparte nuestra condición humana, que se hace cercano, solidario con nuestro dolor, que entra en nuestras tinieblas para devolvernos la luz”.
Por eso invitó a hacer nuestra la actitud de Jesús: "No dividir, sino compartir. Hagamos como Jesús: compartamos, llevemos las cargas los unos de los otros, mirémonos con compasión, ayudémonos entre todos. Preguntémonos: ¿soy una persona que divide o que comparte?”.
28/08/2016 13:40
07/01/2018 14:30