Disidente chino demanda a Yahoo: fue cómplice de Beijing en mi arresto

Ning Xianhua presentó una demanda judicial contra la compañía estadounidense dedicada a la web. Él participó en las manifestaciones de Tiananmen de 1989, en reclamo de la democracia. Fue arrestado y condenado por subversión luego de que Yahoo entregara sus correos electrónicos al ministerio público chino. En un caso de 2007, el coloso de Internet favoreció el arresto de un periodista chino: “Moralmente, son pigmeos”, dijo un diputado del Congreso de los EEUU en aquella época.

Beijing (AsiaNews) – Un disidente chino refugiado en los Estados Unidos acusa a Yahoo de haber colaborado con el gobierno de Beijing para perseguirlo y encarcelarlo. Ning Xianhua inició una demanda judicial contra Verizon, el coloso estadounidense de las telecomunicaciones y propietario de la compañía web. En la demanda, presentada ante un tribunal de California, él acusa a Yahoo de haber entregado datos personales suyos a las autoridades chinas. Los datos estaban incluidos en sus cuentas de correo electrónico.

Ning, de 69 años, participó en las manifestaciones de Tiananmen, en reclamo de la democracia, en 1989, que fueron sanguinariamente reprimidas por Beijing. Él sostiene que a causa de los datos personales cedidos a Yahoo, sufrió años de violencia y torturas. En base a las leyes estadounidenses, el disidente puede ser resarcido por los abusos sufridos en el exterior debido a la connivencia de un empresa estadounidenses.

El activista sindical fue condenado en el 2004 por “subversión contra el Estado”. Pasó siete años en prisión y en el 2016 se refugió en los EEUU. Para sustentar las acusaciones contra Yahoo, Ning incluyó en el expediente un memorándum que sus abogados atribuyen al tribunal chino que lo juzgó. El documento contiene numerosos emails, que las autoridades judiciales de su país habrían usado para incriminarlo y posteriormente, condenarlo.

No es la primera vez que Yahoo termina acusada por colaborar con China en la represión del disenso, a cambio del derecho a operar en el mercado interno del gigante asiático. En un célebre caso del 2007, un grupo de activistas chinos había demandando a una compañía de EEUU por favorecer el arresto del periodista chino Shi Tao, que fue condenado a 10 años de prisión por “revelar secretos de Estado”.

Gracias a Yahoo, las autoridades chinas tenían en su poder un email que Shi había enviado a organizaciones humanitarias extranjeras. Por el caso, la compañía terminó en la mira del Congreso de los EEUU. “Ustedes son gigantes de la tecnología y de las finanzas, pero moralmente, son pigmeos”: durante una audiencia, éstas fueron las palabras del diputado demócrata Tom Lantos, dirigiéndose a Jerry Yang, líder de la compañía en aquella época.

La relación de las grandes empresas de la web con Beijing siempre ha sido accidentada. Facebook está prohibida en el territorio chino, pero a través de la aplicación fotográfica Instagram puede llegar a 3,7 millones de usuarios en China. Tal como ha sucedido con Facebook, Apple y Amazon, Google también se ha alineado recientemente con la política “nacionalista” de la administración Trump. En el 2017, Google fue criticada por Washington por haber abierto en Beijing un laboratorio de investigación sobre inteligencia artificial.