Cristianos de la Llanura de Nínive, el futuro después del Isis
Ayer la comunidad recordó con una solemne ceremonia el cuarto aniversario de la salida al poder del Estado islámico, luego derrotado. El p. Paolo: los cristianos trabajan con “ideas y proyectos nuevos” de desarrollo. Más del 50% de las casas fueron reconstruidas, se están estudiando la creación de pozos, jardines y parques de juegos. El retorno de los cristianos y su número son “determinantes” para el futuro.
Karamles (AsiaNews)- Una oración “de alegría y de esperanza” para el futuro de la comunidad cristiana local y de todo el país. Hace cuatro años, como ayer, “comenzó la grande fuga” por la llegada del Estado islámico (SI, ex Isis). Hoy se celebra “el retorno, la presencia”, mirando al futuro “con ojos y espíritu nuevos”. Es cuánto narra a AsiaNews el p. Paolo Thabit Mekko, sacerdote y responsable de la comunidad cristiana en Karamles, en la llanura de Nínive (norte de Irak), que ayer conmemoró “el cuarto aniversario del éxodo forzado” hacia Kurdistán para escapara de las milicias yihadistas. Centenares de fieles han participado en la misa y en la procesión, acompañada por antorchas y recitando salmos, en una atmósfera de paz, alegría y recogimiento.
“La celebración de ayer- explica el p. Paolo-no es el recuerdo de un momento feo, porque llegó el momento de leer el pasado con ojos y espíritu nuevos, con una verdadera esperanza. Aquello que parecía imposible, se hizo posible y contamos con que otros pasos se realicen”. La comunidad cristiana de Karamles “está yendo hacia el futuro” realizando “ideas y proyectos nuevos, para desarrollar la zona. Las prioridades son garantizar el trabajo y reforzar las actividades espirituales y sociales, para dar un nuevo sabor a la vida después de las devastaciones del Isis”.
Las prioridades, continúa el sacerdote, sigue siendo la obra de reconstrucción; en lo que se refiere a las habitaciones “hemos superado el 50-60% de casas reconstruidas. Estamos en 400 sobre 800, pero algunas de éstas serán abandonadas porque están demasiado dañadas”. La esperanza, agrega es la de crear “pequeñas empresas agrícolas o agro-alimentarias, para garantizar un apoyo a la ocupación”. A esto se agregan proyectos para la realización o creación de “pozos, jardines y parques de juegos” para los niños y jóvenes dentro de la ciudad. Además, crear cursos de música para los estudiantes, juegos con agua y actividades recreativas para la estación veraniega,y momentos alegres.
“Estamos estudiando las modalidades de cómo adherir-subraya el p. Paolo- al proyecto Living Peace, una iniciativa de paz que hasta ahora puso raíces en 153 países del mundo. En Portugal me encontré con los fundadores del proyecto y estoy tratando de introducirlo dentro de las clases de catecismo. Para el nuevo año académico, el objetivo es el de involucrar también a las escuelas estatales y que en su interior estén incluidos ya sean estudiantes cristianos como musulmanes. Este sería un primer paso, factual, para educar a los niños de todos los institutos de Karamles a la paz, para luego extenderlo por todo el país”.
El p. Paolo fue responsable del campo prófugos. “Ojos de Erbil”, en la periferia de la capital de Kurdistán iraquí, donde en ese tiempo encontraron refugio centenares de miles de cristianos (junto a musulmanes y yazidíes) después de la llegada de Estado islámico. El año pasado, por estos días, recuerda, en concomitancia con la vuelta de los primeros refugiados cristianos a la ciudad “reinaba un sentimiento de miedo, mientras que ahora estamos volviendo, si bien todavía lentamente, a la normalidad”. Para terminar la reconstrucción del primer grupo de casas se necesitan aún un millón y medio de dólares, luego están los proyectos secundarios como el agua, con la construcción de pozos y la electricidad a través de nuevos generadores de corriente.
“El retorno de los cristianos, su número y su presencia en el país es un factor determinante para el futuro”, advierte el sacerdote, favoreciendo el retorno y garantizando una mayor autonomía y una creciente participación dentro de las instituciones estatales. En estas horas el ministerio de Exteriores iraquí anunció un trabajo de coordinación con el Vaticano para limitar la emigración cristiana. “Para que los cristianos puedan quedarse, el gobierno y las instituciones deben asegurar paz y tranquilidad”. Además, concluye el sacerdote, “nos auguramos que siempre más parroquias en el mundo, sobre todo en Occidente, nos vengan a visitar y promuevan hermanamientos como signo concreto de solidaridad”.
17/12/2016 13:14
01/09/2021 15:28