Covid-19: Filipinas supera a China por contagios, obispos (una vez más) contra Duterte
Son los países con el mayor número de casos en la región Asia-Pacífico. Ayer el dato récord con 3.954 nuevos infectados. Obispo de Kidapawan: en Duterte “orgullo, prejuicio y poder prevalecieron sobre el bien común de la población”. El presidente invita a los pobres a desinfectar las mascarillas protectoras con gasolina.
Manila (AsiaNews) - Filipinas superó a China por número total de infecciones de coronavirus en la región Asia-Pacífico; Singapur (51.809) está en el tercer puesto. Es cuanto surge de los datos actualizados, difundidos en estas horas, por los expertos de la Organización mundial de la salud, según la cual el archipiélago presenta 89.374 contagiados de Covid-19, frente a los 84.292 de China. Queda en cambio a las espaldas por el número de víctimas: 1.983 a las 4.634 chinos.
Los números publicados hoy por la OMS, siguen a aquellos difundidos ayer por el ministerio de salud, que registró el dato récord sobre una base jornalera de nuevos contagios (3.954), al cual se agrega también el valor más alto en términos de curaciones (38.075). En este caso, explican fuentes del gobierno, se volvió a calcular el dato considerando “Covid-19 free” también a los que son asintomáticos o tienen una carga viral muy baja.
Mientras tanto la Iglesia católica filipina vuelve a atacar al presidente Rodrigo Duterte por la gestión de la pandemia, que podía representar una ocasión óptima para reunir a la población reforzando la solidaridad, en cambio se convirtió en elemento de ulteriores divisiones. Comentando el quinto discurso pronunciado recientemente a la nación por el presidente, Mons.José Colin Mendoza Bagaforo, obispo de Kidapawan (Cotabato), subraya que “orgullo, prejuicio y (búsqueda de) poder prevalecieron sobre el bien común de la población”.
El prelado, que es también director nacional de Caritas Filipinas, agrega que “el presidente perdió la oportunidad de unir a la gente” en un momento de “extrema necesidad”. Al contrario, su discurso duró una hora y 40 minutos estaba tachonado de tonos y palabras “que dividen” y “retóricas”. Como un “disco roto”, Duterte recurrió al mismo tono usado para la lucha contra la droga, “terminado en homicidios extrajudiciales, corrupción y beneficios a amigos y aliados”. La única cosa que logra pensar. concluye Mons. Bagaforo, es “la venganza” que termina por “romper un país ya dividido” sin dar indicaciones “sobre las modalidades a emprender para reforzar el sistema sanitario” y garantizar servicios “también a las categorías más vulnerables”.
Desentendido de las críticas de los obispos y de la ironía general, el presidente vuelve hoy a recomendar “a los pobres” el uso de la gasolina para limpiar las mascarillas protectoras, faltando alcohol u otros desinfectantes. Duterte había lanzado la propuesta la semana pasada, pero muchos consideraban sus palabras sólo como una provocación o una invitación irónica.
Nada de todo esto, y el mismo presidente los reafirmó hoy atacando (e insultando) otra vez a críticos y opositores. “No estoy bromeando”, dijo. “Alguno afirma que Duterte está loco. Si fuese loco, deberían ser vosotros el presidente, no yo”. “Cuanto tengo, afirmó-concluyó-corresponde a verdad. Si no tienen alcohol, en modo especial los pobres, vayan a la gasolinera y usen el carburante para desinfectarse. No es una broma”.
31/08/2020 15:31
19/08/2020 12:41