Covid-19, el compromiso de los jóvenes católicos indios junto a los enfermos

de Nirmala Carvalho

En todo el país, los grupos del Movimiento de Jóvenes Católicos Indios se movilizaron para ofrecer ayuda, desde la distribución de paquetes de alimentos hasta acompañar a las familias de distintas confesiones religiosas para enterrar o cremar a sus muertos. Los testimonios: "La gratitud de las personas que encontramos es imposible de describir".

Mumbai (AsiaNews) - Desde la distribución de cajas de alimentos a los necesitados hasta la cremación de los cuerpos de los difuntos, la asistencia a los que esperan fuera de los hospitales y las donaciones de sangre. El compromiso de los jóvenes católicos indios junto a los pacientes de covid-19 tiene muchas caras, en un país que ha puesto de rodillas la pandemia en las últimas semanas.

El padre Chetan Machado, secretario ejecutivo de la Comisión Juvenil de la Conferencia Episcopal de la India (CCBI), relata a AsiaNews cómo se ha concretado este compromiso: "En medio de esta tragedia, el Indian Catholic Youth Movement (Icym), la asociación juvenil que depende de la Conferencia Episcopal, ha estado en primera línea en las operaciones de asistencia en muchas partes del país. Los jóvenes no dudaron en correr el riesgo de infectarse con el virus para ayudar a los necesitados, los pobres y los migrantes. Los equipos del ICYM no solo han promovido en la red campañas de vacunación sino que también ofrecieron ayuda física, apoyo económico y consuelo”.

“El compromiso de los jóvenes ha brindado apoyo a mucha gente - continúa el P. Machado. Muchos se ofrecieron para acompañar a los pacientes en los hospitales, ayudar a los ancianos o asistir a las familias que luchan por enterrar o incinerar a sus muertos de manera digna. Nuestros grupos están dando pruebas de una gran generosidad. El 'Indian Catholic Youth Movement siempre ha estado en primera línea durante las catástrofes, desde las inundaciones en Kerala y Karnataka en 2018, pasando por el terremoto en Nepal y los ciclones más recientes. Con más de 2,5 millones de jóvenes en todo el país, el ICYM ha estado al lado de la gente en los momentos más difíciles. Y ahora sigue haciéndolo con las personas afectadas por el covid-19”.

Rajesh, del grupo ICYM de Bangalore, ayudó en la cremación y entierro de las víctimas de covid-19. “Mis padres - cuenta - no querían que fuera, pero era una causa noble. Ahora que he ayudado a estas familias con los restos de sus seres queridos, me enorgullece ser reconocido como un joven católico”. Robin D'Souza, un joven de Delhi, dice a AsiaNews: “Ayudar a los afectados por el covid es una forma de acompañar a los que han quedado marginados debido a la pandemia. Brindamos ayuda sanitaria y económica a quienes las necesitan, llevando raciones básicas de alimentos y medicinas. Yo me encargo de responder a los que llaman todos los días y muchas veces los siento llorar. Nos aseguramos de que ningún pedido quede sin respuesta y la ayuda llega dentro de las 48 horas”.

Leon Saldanha, presidente diocesano de ICYM en Mangalore, explica a AsiaNews: “Cada día es una experiencia diferente. Vemos gente en las calles que busca desesperadamente comida y la forma en que nos agradecen es imposible de describir. Algunos están tan débiles que sus rostros se iluminan cuando les preguntamos si quieren algo de comer. Estamos seguros de que sus oraciones y bendiciones nos acompañarán durante toda la vida”.

“También hay gente de clase media - prosigue León - que tienen una hermosa casa pero se han empobrecido porque no pueden trabajar. Les da vergüenza pedir comida, son sus vecinos los que nos llaman. Hacemos todo lo que está a nuestro alcance para llegar a todos: estoy seguro de que Dios está obrando a través de nosotros porque estamos trabajando desde hace 33 días y nunca nos han faltado fondos. Agradecemos a todos los que nos han ayudado y orientado”.

Jason, de la región de Karnataka, cuenta a AsiaNews: “Vimos que a muchos jornaleros y migrantes internos les resultaba muy difícil tener una comida al día durante el confinamiento. Por eso decidimos distribuir cajas de alimentos. También pusimos en marcha un equipo de servicios funerarios que se ocupa de familias no católicas, cada una con sus propios ritos. Son tiempos difíciles para todos y cada uno debe hacer todo lo posible para ayudar a los demás”.