Continúan las violencias. El obispo de Vinh: 'Respeten la voluntad popular'
Manifestantes han asaltado el Comité popular provincial y rechazado a 120 funcionarios de policía. Las autoridades han arrestado 102 personas en relación a los hechos del domingo. La posición del obispo de Vinh es neta: “El proyecto de ley debe ser discutido por personas a todos los niveles y debe pasar por un referéndum”.
Hanói (AsiaNews)- El próximo 15 de junio la Asamblea nacional vietnamita habría debido aprobar un proyecto de ley sobre las “unidades administrativas-económicos especiales”. En particular, los legisladores tendrían que haber tenido que deliberar sobre la creación de 3 importantes polos económicos chinos en Vân Đồn (provincia de Quảng Ninh), Bắc Vân Phong (Khánh Hòa) y en la isla de Phú Quốc (Kiên Giang). Si fuese aprobado, gracias a particulares incentivos, la decisión permitiría a China la adquisición por 99 años de los derechos de explotación de las áreas, situadas en regiones de importante interés geopolítico e histórico. Después de las protestas suscitadas por un proyecto de ley el gobierno anunció que la discusión de la medida será postergada para una fecha todavía no definida.
La “ley sobre la seguridad de Internet” fue en cambio aprobada hoy. Esta impone severas restricciones que obliga a los usuarios a dar informaciones personales. Los accesos a los blog de política de Google, Facebook e Youtube serán bloqueados. El gobierno desplazó a 10 mil miembros de la unidad militar de guerra cibernética para custodiar las “opiniones políticas erradas” que pueden proliferar en internet.
Las autoridades han condenado las recientes revueltas y amenazado con arrestos de masa en Bình Thuận, provincia en Vietnam del sud. Las autoridades locales dijeron que las protestas del domingo 10 de mayo “han tenido graves consecuencias”. En una conferencia de prensa ayer por la tarde, el vice jefe del departamento de propaganda provincial de Huỳnh Thái Dương dijo que “el acto de vandalismo de las oficinas gubernamentales dl pueblo es increíble en este tiempo de paz”.
La protesta de dos hace días comportó daños al edificio de la junta provincial del Parlamento y la destrucción de una docena de vehículos. Los hechos del domingo son “comparables a una revuelta”. Dương concluyó que son acciones “inaceptables” y “deben ser castigadas”. Los medios estatales han denunciado el arresto de 102 personas.
Justamente en el momento de la conferencia de prensa, un gran número de manifestantes bloqueó una sesión de la autopista nacional n° 1, paralizando el tráfico entre norte y sur de Vietnam por horas. El presidente del distrito de Tuy Tuy Phong, Huỳnh Văn Điể acusó a los manifestantes de haber incendiado autos de la policía en la autopista y de haber lanzado bombas molotov. En el episodio, los manifestantes apoyados por la población local han rechazado a 120 funcionarios de la policía y los han obligado a retirarse al cuartel general de la policía local. Aquí los policías se entregaron a los manifestantes, les quitaron las divisas y dejado todos los instrumentos (foto 1). El cuartel general de la policía local fue destrozado y los vehículos fueron incendiados (foto 2). Este episodio hace pensar que la policía no parece dispuesta a combatir contra el propio pueblo que protesta contra la venta a un precio demasiado barato de los terrenos a China.
En altas horas de la noche, centenares de manifestantes han asaltado la oficina del Comité popular provincial por la segunda noche consecutiva. Se enfrentaron ferozmente con la policía. La petición para la inmediata liberación de los 102 arrestados fue rechazada. Esta mañana, otro grupo de 99 personas fue arrestado en Bình Thuận. Según el informe de los medios del Estado la policía en las provincias limítrofes también arrestó a decenas de personas por haber guiado las protestas “ilegales”. Entre estos están los manifestantes que han involucrado en una huelga en la empresa textil taiwanesa Polyene de Saigón.
El obispo de la diócesis de Vinh y presidente de la Comisión Justicia y paz Nguyễn Thái Hợp hizo una declaración en la cual exhorta al gobierno a abstenerse de la violencia contra el propio pueblo y a escucharlo. El prelado escribió que el proyecto de ley sobre las zonas especiales “puede seriamente comprometer nuestra seguridad nacional y nuestra soberanía nacional. Es necesaria la participación de todas las personas para saber qué piensan. Por lo tanto, el proyecto de ley debería ser ampliamente discutido por personas a todos los niveles, en particular modo por especialistas a través de debates científicos. Al final deberían pasar por un referéndum, como establecido por la ley. Y concluyó: “El Comité para la Justicia y la paz de la Conferencia episcopal vietnamita sugiere, con respeto, que la asamblea nacional deba respetar la voluntad popular”.