China, el Partido Comunista arrincona aún más a las ONGs y a las religiones

El Departamento para la organización del PCC “invita con fuerza” a las asociaciones civiles a incluir funcionarios comunistas entre sus directivos a cambio de beneficios económicos. Según los expertos se trata de una primera etapa, a la cual seguirá la represión a quien no se adecue a la norma. El Frente Unido reclama a los cuadros políticos: “No se puede adherir a ninguna fe”

Beijing (AsiaNews) – El Departamento para la organización del PCC ha “invitado con fuerza” a las asociaciones no gubernamentales, a los sindicatos y a las Fundaciones vinculadas a la sociedad civil a “aumentar el número de miembros del PCC dentro de los organismos a cargo de la toma de decisiones”. La iniciativa, informa la agencia de prensa oficial Xinhua, “hoy es más necesaria que nunca. Estas instituciones son guiadas en su justa dirección a través de las decisiones tomadas por el gobierno central”.

Aquellos grupos que incorporen dos o tres miembros más del Partido en sus propios órganos directivos “deberían luego establecer una célula comunista. Ésta deberá educar a las personas comunes con quienes entran en contacto y movilizarlas contra las influencias negativas y las actividades ilegales”. Por el momento, las nuevas directivas no prevén castigos para quienes las desatienden: sin embargo, garantizan beneficios fiscales y el desbloqueo de fondos gubernamentales para quienes las acaten.

Varios expertos consideran que esta se trata de una “fase transitoria, de estudio”, a la cual seguirán medidas represivas contra quienes no sigan dicho dictado. Esto no atemoriza a Zeng Feiyang, director del Centro para el cuidado de los trabajadores migrantes de Guangdong, quien explica al China Morning Post: “Somos una organización de servicio social. No queremos ser y no seremos politizados. La independencia es para nosotros algo muy importante, porque de esta manera podemos brindar un servicio útil sin tener que responder a ninguna agenda política”.

La presiones del Partido sobre la sociedad parecen querer incluir también a la religiones. El Departamento del Frente Unido – organismo de gobierno que “cuida” las relaciones con los cinco cultos oficiales del país (Catolicismo, Cristianismo protestante, Islam, Budismo y Taoísmo) – ha dispuesto algunas reglas “oficiales” que de hecho prohiben que los miembros del PCC sigan una fe religiosa.

El comunicado de la agencia oficial Xinhua que anuncia las nuevas normas se muestra vago y declara: “Esta nueva medida es esencial para permitir al Partido unir sus fuerzas dentro de la sociedad. Porque China se está transformando, con reformas en casi todas sus áreas”.