Chiang Rai, los ‘Wild Boars’ se hacen monjes para honrar al buzo muerto en las cuevas
Comprometidos en mostrar su gratitud, los muchachos ingresan al monasterio por nueve días. Con la excepción de Adul Sam-on, un catecúmeno cristiano protestante de 14 años de edad, los chicos y su entrenador fueron ordenados en el templo situado sobre la misma montaña donde quedaron atrapados. Los 11 novicios y el monje estudiarán el dharma y serán huéspedes del templo de Wat Phra That Doi Wao.
Chiang Rai (AsiaNews/Agencias) – Los jóvenes futbolistas que sobrevivieron luego de permanecer 18 días atrapados en las gurtas inundadas de Tham Luang, en el distrito septentrional de Mae Sai, fueron ordenados como monjes novicios a fin de honrar la memoria del socorrista muerto durante las operaciones de rescate. Los rituales budistas tuvieron lugar en el templo de Wat Phra That Doi Tung, situado a unos 45 km de Chiang Rai, sobre el monte Doi Nang Nong. Es justamente el lugar que alberga el complejo subterráneo donde los muchachos quedaron atrapados.
A excepción del Adul Sam-on, de 14 años, un catecúmeno cristiano protestante, los ‘Wild Boars’ y su entrenador Ekapol Chanthawong recitaron la oración de ordenación en la sala principal del templo. Durante la solemne celebración, que fue transmitida por el gobierno local a través de Internet, ellos solicitaron permiso a las autoridades religiosas a fin de iniciar un período de monacato de nueve días de duración. El grupo escucho algunos cantos sacros antes de colocarse los hábitos de color naranja azafrán. Como preparación para el noviciado, ayer, los chicos participaron en la ceremonia de rasurado de la cabeza (fotos 2-3-4).
En el evento de hoy también estuvieron presentes Walifone Kunan, la mujer del difunto Saman Kunan, el ex buzo de la Marina tailandesa. En estado de shock tras recibir la noticia de su muerte, los ‘Wild Boars’ se comprometieron a mostrar su reconocimiento, entrando en el monasterio. Durante la ceremonia, el responsable de la oficina budista de Chiang Rai, Praphan Khamchoi, reafirmó: “La ordenación también es su modo de agradecer a todos los socorristas, tanto a los que están en Tailandia como a los de los demás países”.
La tradición marca que, llegado un momento de la vida, los budistas tailandeses varones entran al monasterio –normalmente como novicios- para mostrar gratitud. Se cree que una vez ordenada, una persona obtiene méritos que pueden extenderse hasta los progenitores. Los 11 novicios y el monje estudiarán el dharma y serán huéspedes del templo de Wat Phra That Doi Wao, ubicado, también en el distrito de Mae Sai. Ekapol, que en el pasado fue monje del templo de Wat Sao Hin, en Lamphun, durante casi ocho años, esta vez proseguirá el camino espiritual, permaneciendo un mes más que sus jugadores.
23/07/2018 09:59