Celebrada la frágil tregua en Gaza. Incierto futuro de paz
Jerusalén (AsiaNews) - Hay un acuerdo
alcanzado ayer para un alto el fuego permanente en Gaza, firmado por los
israelíes y los palestinos a
través de la intervención del mediador
egipcio después de semanas de intensos combates. En la
noche, no hubo incidentes de
violencia y las armas han dado
paso a la política; no se han
producido ataques con cohetes desde la Franja de Gaza y la aviación Tel Aviv se mantuvo
en tierra. La tregua se dio ayer por la tarde a los 18 y debería poner fin - a la espera de soluciones
a largo plazo - una guerra que ha
dado lugar a casi 2.200 palestinos muertos (muchas víctimas entre la población civil) y alrededor de 70
entre israelíes, considerado como un genocidio en
la Franja. Hamas saludó con satisfacción el acuerdo, que define
una "victoria de la resistencia"; pocos comentarios de la parte israelí, aunque hay críticas de la extrema derecha al gobierno por cancelar la operación militar.
El acuerdo contempla la flexibilización del bloqueo impuesto por Israel a Gaza en
2006 y que ha devastado a la población civil de la Franja de Gaza, donde un pedazo de tierra es el hogar de más de un millón 800 mil palestinos. Entre
los principales puntos del
acuerdo, la apertura de los pasos
para el pasaje de alimentos y ayuda humanitaria, así como suministros
médicos y equipos devastados
por los bombardeos. Más de 17 mil viviendas fueron destruidas y cerca de 100 mil personas están sin hogar.
El próximo mes en
El Cairo, Egipto, deberán iniciarse
conversaciones indirectas para
resolver algunas cuestiones clave,
como el desarme de las milicias
de Hamas, la apertura de un aeropuerto y un puerto, la liberación de 100 prisioneros. Los Estados Unidos ha dado la bienvenida
con aplausos el logro de la tregua y trabajan por una solución política al conflicto. Satisfecha
también las Naciones Unidas, aunque el secretario general Ban Ki-moon, ha declarado
que "cualquier esfuerzo de
paz que no aborde las causas
profundas de la crisis, sólo será el escenario para el próximo ciclo
de la violencia".
De Israel y Palestina surgen críticas sobre la
posibilidad de una solución política (y a largo plazo) de la crisis. Entrevistado por la AsiaNews el prof. Bernard Sabella,
un católico, representante de Fatah
para Jerusalén, secretario ejecutivo del
servicio a los refugiados palestinos en
el Consejo de Iglesias de Oriente Medio,
habla de "excelente paso adelante". Sin embargo, advierte
que es "necesaria" una
solución de naturaleza "duradera"
y "política", porque no se
puede continuar "con esta situación
de guerra, cada tres años". El
académico planteó la solución,
la única posible "dos
pueblos y dos Estados", y para conseguirlo
se "necesita un liderazgo
fuerte", que sepa cómo dar
prioridad a la acción política sobre la militar. El
reto, advierte, es "asegurar que Hamas acepte
una agenda política que pertenece a
todos los palestinos", y esto debe
ser "el objetivo del gobierno".
El representante de Fatah señala que no es suficiente
una tregua,
sino que debe "arrancar las razones
últimas del problema"; señala
que "se puede decir lo que se
quiera de Hamas, pero es responsabilidad de todos,
incluyendo a Israel, encontrar
una solución" que no es la opción militar. Y cercar Gaza no sirve para garantizar la seguridad de los israelíes,
porque "no hay paz, sin seguridad". En este contexto, concluye, sigue siendo la obra fundamental
de la Iglesia y de los cristianos en Tierra Santa, los primeros seguidores "en el campo" de la paz y la solución
política de los conflictos.
En el lado israelí surgen dudas y recelos. Sermoneta Yedidia, israelí
y experto en política de Oriente Medio,
dijo que "la tregua ahora va a durar por lo
menos dos o tres semanas",
pero el futuro "sigue siendo
muy incierto", y no puede hacerse predicciones, "a largo
plazo, debido a que el mundo árabe
está en fermento y
el paisaje puede cambiar en un día". En Israel,
añade, el acuerdo "no fue bien recibido" porque la gente "no se fía y hay un
clima de decepción"; la población
habría querido una acción más decisiva
en Gaza, en un ataque de "limpiarla de túneles y armas".
El politólogo israelí
no cree en una solución política,
porque Hamas es un
obstáculo demasiado fuerte para la
paz. "Lo que veo - dijo
- es que ahora habrá
una tregua para que Hamas pueda obtener dinero de los países árabes, pero en uno o dos años habrá un
ataque contra Israel, incluso con
más fuerza, con Hezbollah y Hamas, de norte a sur."
Hablar de la paz es
necesario "un socio", concluye, y en el lado palestino, "no veo una fuerte personalidad: Hamas y Fatah no hablan y carecen de un verdadero líder" capaz de garantizar la representatividad y la unidad.
Para comprender mejor los obstáculos
para un posible camino hacia la
paz, es interesante observar los
resultados que se desprenden de un estudio reciente desarrollado
por el instituto Palestinian Center for Public Opinion (Pcpo). El estudio muestra que alrededor del 61% de los palestinos es
"contraria" a la asignación
de una fuerza multinacional dirigida por
la ONU en la Franja de Gaza;
además, una gran mayoría (88,9%) apoya firmemente el lanzamiento de cohetes
desde Gaza hacia Israel,
y el 75,4% cree que se "aumenta" la
fuerza de disuasión de la resistencia palestina. Por último,
el 54% de la población está "satisfecho"
con el trabajo del presidente de la
Autoridad Palestina, Mahmoud Abbas
(Abu Mazen), mientras que 'negativa' la posición del Secretario General de Naciones Unidas Ban Ki-moon.
(DS)