Cardenal Poola: con María en busca de los débiles
La reflexión del arzobispo de Hyderabad -el prelado dalit elegido por el Papa Francisco para el colegio cardenalicio- en el día de hoy, Jornada Mundial del Enfermo y fiesta de Nuestra Señora de Lourdes: "La oración y la cercanía con los que sufren anuncian a todos una nueva manera de caminar juntos".
Hyderabad (AsiaNews) - La Iglesia católica celebra hoy en todo el mundo la Jornada Mundial del Enfermo, instituida por Juan Pablo II en 1992 en la fiesta de la Virgen de Lourdes. Con motivo de este aniversario, el arzobispo de Hyderabad, India, card. Anthony Poola - el primer cardenal proveniente de una familia dalit (los llamados sin casta) - presidió una misa en el santuario de Gunadala Matha, una misión fundada hace un siglo por el P. Ugo Pezzoni, misionero del PIME, cerca de Vijayawada, en Andra Pradesh. Desde hace algunos años, la fiesta de Nuestra Señora de Lourdes atrae a decenas de miles de fieles a este lugar. Publicamos a continuación un extracto de la homilía pronunciada hoy por el Card. Poola.
La revelación nos dice que Dios está presente en medio de nosotros. Todas las apariciones marianas -en Lourdes, Fátima, Vailankanni, Guadalupe o Medjugorje- enseñan quién es Dios y cómo debemos dirigirnos a Él.
Bernardita resume maravillosamente su experiencia de las apariciones marianas en Lourdes: “No puedo explicarle a nadie lo que vi, porque por mucho que trate de explicarlo, cada uno lo entiende a su manera. Dios y la Madre de Dios sólo se pueden comprender cuando cada uno de nosotros los ve cara a cara". En Lourdes, Bernardita recibió una experiencia de Dios. La experiencia de Dios nos sucede a cada uno de nosotros: cuando leemos la Palabra de Dios, cuando participamos en la Santa Misa, cuando hacemos una novena, cuando participamos en un retiro, o en nuestro compromiso por la liberación de los oprimidos. Y Dios hace milagros también hoy. Para darnos cuenta de esto necesitamos los ojos de la fe.
En esta 31ª Jornada Mundial del Enfermo, nuestro Santo Padre ha elegido el tema “Cuida de él: la compasión como ejercicio sinodal de sanación”. Y tiene tres dimensiones: la primera es la Jornada Mundial del Enfermo del 11 de febrero; la segunda es su encíclica Fratelli tutti; la tercera es el sínodo actual para una Iglesia sinodal 2021-2024.
El Papa dice: “La enfermedad forma parte de nuestra experiencia humana. Pero, si se vive en el aislamiento y en el abandono, si no va acompañada del cuidado y de la compasión, puede llegar a ser inhumana”. Nos invita a reflexionar sobre el hecho de que especialmente a través de la experiencia de la vulnerabilidad y de la enfermedad podemos aprender a caminar juntos según el estilo de Dios, que es cercanía, compasión y ternura.
Para explicarlo, toma el texto de Ezequiel 34, 3-4 y 15-16: el fundamento es la compasión de Dios, Dios descarta a los pastores que se alimentaban de las ovejas y se erige como el verdadero pastor, que se compadece y las cuida. Dios viene a buscar a los vulnerables, los enfermos, los débiles y los oprimidos.
En la encíclica Fratelli tutti, a través de una interpretación creativa de la parábola del Buen Samaritano, el Papa Francisco nos invita a ser personas compasivas. En la parábola dos viajeros, considerados piadosos y religiosos, ven al hombre herido, pero no se detienen. En cambio el tercero que pasa, un samaritano, un extranjero despreciado, se compadece y cuida a ese extraño que ha encontrado en el camino, tratándolo como a un hermano. De esa manera, sin siquiera pensarlo, hace que el mundo sea más fraterno.
Cuando estamos enfermos nos sentimos abandonados y solos. A veces podemos pensar que Dios nos ha abandonado o nos ha tratado injustamente. La Jornada Mundial del Enfermo invita a la oración y la cercanía con los que sufren. Pero también quiere sensibilizar al pueblo de Dios, a las instituciones de salud y a la sociedad civil sobre una nueva forma de caminar juntos.
El samaritano le pide al dueño de la posada que "cuide" al herido (Lc 10,35). Jesús nos pide lo mismo a cada uno de nosotros. Nos exhorta "vayan y hagan lo mismo" (Lc 10,37). En este día debemos recordar el compromiso de los trabajadores de la salud y de los trabajadores sociales, de los familiares y voluntarios, a través de los cuales el bien se enfrenta cada día con el mal.
Hoy, volviendo nuestra mirada a Nuestra Señora de Lourdes, podemos imitarla en su búsqueda de los débiles y vulnerables. Ella misma experimentó la vulnerabilidad al pie de la cruz. Tratemos de incluir a los enfermos en nuestro camino. Que ellos estén en el centro.
Invocando la intercesión de María, Arogya Matha, Salud de los Enfermos, le encomendamos a todos los que están enfermos, física, mental y espiritualmente. A ella le encomendamos a nuestros trabajadores de la salud, familiares y voluntarios, para que a través de ellos se construya un vínculo fraterno de comunión. Cuidémonos los unos a los otros a través de la compasión, que es un ejercicio sinodal de sanación.
* arzobispo de Hyderabad
(con la colaboración de Nirmala Carvalho)
10/02/2017 13:35