Campeona de ajedrez boicotea a Riad: yo no hago política, pero cuando juego quiero ser libre

Su decisión le costó un doble título y la posibilidad de ganar 160.000 dólares. Otros jugadores de alto nivel se negaron a participar.

Riad (AsiaNews/Agencias) – Para ella, “lo más importante” es ser libre cuando juega, y se niega a sentirse una “criatura inferior”. Es por eso que la campeona mundial de ajedrez Anna Muzychuk, de 27 años, ha decidido boicotear el Campeonato Mundial en Arabia Saudita, que se inició el 26 de diciembre en Riad. Al no presentarse, la jugadora ucraniana ha renunciado al título de campeona de ajedrez “rápido” (partidas de 10 minutos) y “blitz” (cinco minutos), además de a la posibilidad de ganar 160.000 dólares.

“Fue difícil tomar la decisión”, ha dicho en una entrevista publicada hoy en Paris Match, para luego agregar: “Yo no hago política. Soy una deportista… Para mí, lo más importante es sentirme libre cuando juego, y no soy la única… Muchos jugadores de alto nivel se han negado a viajar a Arabia Saudita”, continuó Muzychuk, citando a su hermana, Mariya, campeona en Sochi (Rusia) en 2015, y a otros jugadores de China, Reino Unido y Dinamarca.

Durante la entrevista, le preguntaron a la ajedrecista acerca de su experiencia vivida en los recientes torneos en Qatar (diciembre de 2016) e Irán (marzo de 2017). “En Qatar, hacíamos lo que queríamos”, respondió Muzychuk. “En Irán, fue una experiencia difícil para mí. Quería participar a como diere lugar en el campeonato mundial, para ganar el trofeo que me faltaba… llegué a la final, pero hice un gran esfuerzo, ¡porque estaba obligada a llevar el velo todo el día!” Con anterioridad, la jugadora había escrito en Facebook que no quería vestir el abaya, el hábito islámico largo que cubre las formas femeninas, porque “todo tiene un límite, y el velo en Irán ya ha sido más que suficiente”.

El 23 de diciembre, Muzychuk anunció su decisión en su página del sitio, explicando que no participaría en el campeonato porque no quería vestir el abaya, y que tampoco quería ser escoltada mientras caminaba ni sentirse como “una criatura inferior”.

La apertura al mundo femenino promovida por el príncipe heredero Mohammed bin Salman no convenció a la jugadora, como tampoco la convencieron los intentos de los organizadores, que trataron de brindarle tranquilidad en el sentido de que no tendría que vestir el velo, ni el abaya, sino pantalones oscuros y blusas blancas de cuello alto. Al hablar con el periodista de Paris Match, la jugadora comentó los cambios positivos, afirmando que estará “feliz de viajar [cuando sea] en un contexto en el cual las mujeres estén en una situación distinta a la que hoy se impone en Arabia Saudita”. En el reino wahabita, las mujeres aún son obligadas a cubrirse el cabello y el cuerpo cuando están en público, y no pueden viajar ni recibir atención médica si no es con el permiso de un guardián masculino (generalmente el padre, marido o un hijo).