Cachemira, 100 muertos por los aludes. Una niña permaneció 18 horas bajo la nieve y está con vida
Samina Bibi se fracturó una pierna pero está en buenas condiciones. Su casa fue arrollada por una avalancha y perdió un hermano y una hermana. El Valle de Neelum permanece aislado. Las operaciones de recuperación y rescate se realizan con helicópteros. Para mañana, se prevén nuevos aludes.
Islamabad (AsiaNews/Agencias) – “Pensé que moriría”: es el relato de Samina Bibi, una niña de 12 años que permaneció 18 horas bajo la nieve y que fue rescatada con vida, ayer, en Pakistán. La muchacha se encuentra hospitalizada en un nosocomio de Muzaffarabad, en la parte pakistaní de Cachemira, al igual que decenas de otros heridos, Ella es uno de los sobrevivientes a los aludes que azotaron repentinamente la región del Valle de Neelum en los últimos dos días. Según las autoridades, al menos 100 personas más han muerto sepultadas bajo la nieve o arrastradas mientras se encontraban en sus hogares.
Para Shahnaz Bibi, la madre de Samina, el hecho de que su hija esté viva “es un milagro”. La mujer ha perdido a su otra hija y a un hijo a causa de la avalancha que barrió con su casa. “Estábamos acurrucados junto al fuego – cuenta – y todo sucedió en un instante. Ni siquiera nos dimos cuenta”. Luego agrega que no sintió el rugido que normalmente precede a un alud, y que “ya había perdido la esperanza de volver a ver a Samina”. La niña sobrevivió a pesar del frío. Tiene una pierna rota y el labio partido. Cuenta que “mientras estuvo atrapada, gritaba pidiendo ayuda”.
Según la National Disaster Management Authority, mañana se esperan nuevos aludes, que podrían provocar más daños. De momento, el Valle permanece aislado a causa del desprendimiento de nieve y la caída de rocas de las montañas. Las operaciones de socorro se realizan exclusivamente con el uso de helicópteros.
Las autoridades informan que cuando menos 84 viviendas y 17 negocios han quedado completamente destruidos, y que otras 94 casas y una mezquita quedaron parcialmente dañadas. Otras zonas del país han sido azotadas por el frío, sumado a intensas lluvias. Los incidentes provocados por las precipitaciones han obligado a cortar las principales rutas y autopistas, no solo en el Cachemira pakistaní, sino también en la provincia de Baluchistán y Khyber Pakhtunkhwa.
El primer ministro Imran Khan ha pedido a las autoridades competentes que se brinde “toda la asistencia humanitaria posible, de manera inmediata. Las duras tempestades de nieve y los aludes han provocado miseria y muertos”. El comandante del Ejército pakistaní, Qamar Javed Bajwa, ha expresado sus condolencias a las familias de las víctimas y ha ordenado a las fuerzas armadas que continúen brindando apoyo a la administración civil en las operaciones de socorro y asistencia.
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