Burkina Faso opta por Beijing, y deja a Taipéi

de Wang Zhicheng

El país africano recibirá beneficios (económicos) en virtud de esta relación. Para Taiwán, China continúa usando la diplomacia del dólar. Desde que Tsai Ing-wen se convirtió en presidente, cinco Estados han abandonado Taiwán, optando por la China popular.

Beijing (AsiaNews) – Burkina Faso ha decidido establecer relaciones diplomáticas con China; dos días antes de ello, cortó relaciones con Taiwán. La medida de Burkina ocurre pocas semanas después de que la República Dominicana abandonase las relaciones con la isla para promover lazos con Beijing. De esta manera, se reduce a 18 el número de países que reconocen a Taiwán.

El ministro de Relaciones Exteriores de China, Wang Yi, y su colega de Burkina, Alpha Barry, firmaron un comunicado conjunto el 26 de mayo pasado. Wang dijo que el país africano “ha tomado la decisión correcta, siguiendo el curso de los tiempos”. Barry ha resaltado que China es la economía más importante del mundo, y que su nación recibirá beneficios en virtud de esta relación.

Según el Global Times -periódico cercano al Diario del Pueblo, el órgano de prensa del Partido Comunista chino- el comercio entre Taiwán y Burkina apenas llegó a los 13 millones de dólares estadounidenses en el 2015, mientras que en el mismo año, los intercambios comerciales con China sumaron 395 millones.

El ministerio de Relaciones Exteriores de Taiwán (República de China) acusa a Burkina Faso de “ser aliado de la ofensiva diplomática de los dólares” que Beijing lleva adelante, olvidando “la contribución significativa que Taiwán ha realizado en los últimos 24 años”.

Desde el 2016, año en que Tsai Ing-wen triunfó en las elecciones presidenciales, con el apoyo del DPP (Partido Democrático del Progreso), el cual impulsa la autonomía de Taiwán e incluso su independencia, Beijing ha emprendido una campaña sin tregua, orientada a marginar a la isla desde el punto de vista internacional, haciendo que ésta pierda relaciones con cinco Estados: Burkina Faso, la República Dominicana, Gambia, Santo Tomé y Príncipe, Panamá. Este año, al igual que el año pasado, Beijing ha impedido la participación de Taiwán, en calidad de observador, en la Asamblea Mundial de la Salud (World Health Assembly).

Por otro lado, Beijing ha advertido a las compañías aéreas internacionales que debe establecer claramente en sus sitios web y en la información referida a destinos, que Taiwán es parte integrante de China Popular.

Desde 1949, Taiwán es sede del gobierno de la República de China de Chiang Kai-shek, que huyó del continente cuando Mao Zedong tomó el poder. Beijing considera que la isla es una “provincia rebelde” que debe ser reconquistada, para lo cual incluso valida el uso de la fuerza. Según ciertos analistas, la mano férrea de Beijing quiere empujar a Taiwán, que hasta ahora figuraba entre sus mayores inversionistas “extranjeros”, a continuar invirtiendo en China.