Bombay, Primero de Mayo con una desocupación del 24%. Los sacerdotes donan el salario de un mes

de Nirmala Carvalho

A causa del coronavirus, los niveles de desempleo crecieron rápidamente: el año pasado, la tasa de desocupación fue del 7-8%. Con la propagación de la pobreza, crece el número de trabajadores-esclavos y el trabajo infantil. Los empleados que trabajan en la estructuras diocesanas recibirán el salario de marzo y abril completos, a pesar del bloqueo. A los sacerdotes, se les pide renunciar al salario de las vacaciones.

Bombay (AsiaNews) – Este año, en el Día del Trabajo “es difícil celebrar” porque “muchas personas ya no son más trabajadores, sino desocupados”: es lo que afirma Mons. Allwyn D'Silva, presidente de la Comisión para el Trabajo, de la arquidiócesis de Bombay, en el Mensaje difundido con ocasión del Primero de Mayo. La pérdida del empleo se debe, en parte, a la crisis pandémica y a la decisión del gobierno de poner al país en cuarentena. Mons. D’Silva explica: “A mediados de abril, el porcentaje de desocupados subió al 24%; en marzo – en la primera semana del bloqueo, fue del 23,8%. Este es un crecimiento veloz, en comparación con el 7-8% del año pasado”.

Lo cierto es que la desocupación crece en el país desde hace años, y la tasa del 2019, según la Oficina Nacional de Estadísticas, fue la más alta de los últimos 45 años.

“En la India – se lee en el Mensaje –, a causa de las políticas adoptadas en los últimos 20 años, los trabajadores agrícolas y otros sectores informales están perdiendo el trabajo. A causa de la pobreza, pese a que está prohibido por ley, crece el número de trabajadores-esclavos y el trabajo infantil. El tráfico de mujeres y niños es un fruto paralelo de la economía de mercado”.

La parálisis del país ha creado un vasto ejército de personas sin empleo, sin salario, sin comida y sin techo. El arzobispo de Bombay, el Card. Oswald Gracias, ha lanzado un programa de asistencia a los trabajadores migrantes, que incluye la distribución de comida y el alojamiento en algunos centros de hospitalidad. Mons. Allwyn D’Silva forma parte del grupo organizador.

Para responder a las dificultades que atraviesan los empleados en las estructuras diocesanas, ya que no han podido trabajar en dos meses, el Card. Gracias ha ordenado que se les entregue el salario completo de los meses de marzo y abril. También ha pedido a los sacerdotes que renuncien al salario de las vacaciones, para poder responder a las necesidades de la arquidiócesis.