Beirut: la «nueva» mayoría acoge la tregua de Gaza con alivio y cautela
Entusiasmo en los campos de refugiados palestinos en Líbano por el acuerdo de alto el fuego en la Franja entre Israel y Hamás. Nawaf Salam, ex presidente de la Corte Penal Internacional, elegido nuevo primer ministro. Se espera a Macron en Beirut. La Iglesia maronita aplaude la adopción por Líbano del principio de «neutralidad positiva» en política exterior. Primer viaje del presidente Aoun a Arabia Saudí.
Beirut (AsiaNews) - Con una mezcla de «alivio y cautela», debido a los temores de segundas intenciones de última hora del primer ministro israelí Benjamin Netanyahu, las altas esferas políticas de Beirut y la «nueva mayoría» surgida de la votación presidencial del 9 de enero acogieron con satisfacción el alto el fuego alcanzado ayer en Gaza. El anuncio oficial se produjo al término de apretadas negociaciones en Doha (Qatar) y como resultado de la presión conjunta del Jefe de Estado estadounidense saliente, Jeo Biden, y de su sucesor, Donald Trump, que jurará su cargo el 20 de enero. Si el establecimiento del alto el fuego en la Franja «es una señal de que se está estableciendo un nuevo orden regional», como afirman algunos, al mismo tiempo se recuerda en los círculos diplomáticos que la cuestión de fondo, es decir, el establecimiento definitivo de un Estado palestino, sigue «sin resolverse y sin cambiar». Además, en una de sus últimas declaraciones, Matthew Miller, portavoz del Departamento de Estado, habló de la «utopía» de un Estado israelí sólo para judíos «en un país en el que conviven siete millones de israelíes y cinco millones de palestinos».
En el lado libanés, el anuncio del acuerdo de alto el fuego fue recibido con una explosión de alegría marcada por disparos de ametralladora, marchas festivas por calles y plazas, fuegos artificiales y reparto de dulces. «Es el momento que esperábamos desde hace año y medio, después de un genocidio y de tanto sufrimiento. Por fin la victoria!», exclamaba una joven de Bourj el-Brajné, campo de refugiados palestinos situado en la periferia sur de la capital, citada por la prensa francófona.
La noticia de la tregua en Gaza llega en un momento en el que, tras la elección del ex comandante del ejército Joseph Aoun como presidente, la «nueva mayoría» asestó un nuevo golpe al prestigio de Hezbolá al elegir al ex presidente del Tribunal Penal Internacional, Nawaf Salam, como primer ministro por un amplio margen (85 votos de 128). Sintiéndose engañado, el partido proiraní boicoteó las consultas parlamentarias informales dirigidas por Salam inmediatamente después de su elección, con vistas a formar su ejecutivo. «Significativamente debilitado, Hezbolá no sólo perdió la guerra, sino también la cara», señaló un autorizado analista y comentarista local, bajo condición de anonimato por no estar autorizado a hablar con la prensa.
Sin embargo, ante las protestas de los bloques parlamentarios que no quieren que Hezbolá se sienta «excluida» del juego político, aún es posible que el partido dé marcha atrás. El primer ministro designado Salam se ha comprometido a no proceder a la formación de gobierno hasta que haya mantenido conversaciones con el presidente del Parlamento, Nabih Berry. Esta reunión tendrá lugar mañana, viernes 17 de enero. Según las mismas fuentes, Salam está decidido a aplicar al pie de la letra el principio de separación de poderes y excluye asignar una cartera ministerial a un diputado en ejercicio. Además, aunque respeta el principio de paridad entre musulmanes y cristianos en el seno del gobierno, no cree que los componentes comunitarios de su ejecutivo deban estar necesariamente afiliados a partidos o formaciones políticas concretas.
Fase de transición
También mañana se espera en Líbano al presidente francés, Emmanuel Macron, «en una fase de la historia del país que es de transición» hacia una nueva era, según un comunicado emitido por el Elíseo en vísperas de la visita. En esta ocasión, el jefe de Estado transalpino confirmará indirectamente el compromiso permanente del «quinteto» compuesto por Estados Unidos, Francia, Arabia Saudí, Egipto y Qatar de desempeñar el papel de ángel de la guarda del cambio en Líbano. Además, París se compromete a supervisar la aplicación del alto el fuego introducido en noviembre de 2024 y a reforzar el compromiso francés en el seno de la misión Unifil dirigida por la ONU.
En los últimos días, el presidente Joseph Aoun informó al jefe del Mando Militar de Estados Unidos para Oriente Próximo (Centcom), Erik Kurilla, recibido en Baabda, sobre la lentitud de la retirada israelí del territorio libanés cuando faltan poco más de 10 días para que se cumpla el plazo de 60 días para su finalización (27 de enero). También le informó de que se había completado un expediente accesorio al alto el fuego, con el desmantelamiento de todas las instalaciones militares de las facciones palestinas aún dispersas en el sur del Líbano y la Bekaa. Algunas de ellas habían prestado apoyo militar a Hezbolá en su guerra de apoyo a Hamás, que comenzó el 8 de octubre de 2023.
Además, en un movimiento para reequilibrar su presencia en el mundo árabe, hemos sabido que el nuevo Jefe de Estado viajará próximamente a Arabia Saudí, su primer viaje oficial fuera de Líbano, en respuesta a una invitación oficial del príncipe heredero Mohammed Ben Salman.
Neutralidad positiva
Desde el palacio presidencial de Baabda, donde fue recibido ayer por la mañana por Aoun, el patriarca maronita Beshara Raï subrayó la necesidad de ser optimistas para superar los desafíos. «El presidente Aoun -dijo el cardenal- espera que se forme un gobierno lo antes posible, sin exclusiones, para que todas las partes puedan participar en la reconstrucción del país». En su discurso inaugural, el nuevo jefe de Estado afirmó que la «neutralidad positiva» preconizada por el primado de la Iglesia maronita sería el principio rector de la política exterior libanesa bajo su mandato.
17/12/2016 13:14