Beijing: una serie de televisión sobre médicos chinos en África para promover la política de ayuda
Se titula "Welcome to Milele" y es una superproducción de 32 episodios de la Administración Nacional de Radio y Televisión de China, rodada en Tanzania. El objetivo es celebrar los 60 años del envío de los primeros médicos chinos al exterior y los proyectos relacionados con la Belt and Road Initiative. La combinación de cooperación y geopolítica para apoyar sus estrategias sobre el Tíbet, Taiwán y Xinjiang.
Beijing (AsiaNews)- Se estrenó en las plataformas locales de China una nueva serie de televisión dedicada a la vida y el compromiso de un grupo de médicos voluntarios que trabajaron en África. Titulada “Welcome to Milele” [palabra en lengua swahili, muy extendida en África Oriental, que significa “para siempre”], la producción se rodó en China y Tanzania y se basa en una historia real. La serie forma parte de los proyectos y celebraciones para conmemorar el décimo aniversario de la Belt and Road Initiative y los 60 años del envío del primer equipo de médicos chinos al exterior en 1963. La serie cuenta la historia de un grupo de médicos en la aldea africana de "Milele", que fueron como voluntarios para ayudar a la población local y formar a sus colegas en un ambiente de amistad y colaboración.
Según el China Daily, con sus 32 episodios, "Welcome to Milele" es uno de los proyectos más importantes de la agenda de la Administración Nacional de Radio y Televisión de China y ha recibido una amplia cobertura en los medios oficiales y por parte de los más altos funcionarios del gobierno. También fue entusiasta el comentario del ex embajador de Tanzania en China, Mbelwa Kairuki, quien se había reunido con la producción -elenco y colaboradores- antes de que partieran al país africano.
Las estadísticas oficiales muestran que China ha enviado más de 30.000 operadores sanitarios a 76 países de todo el mundo desde que el primer grupo partió hacia Argelia en 1963. El envío de ayuda internacional por parte del gobierno de Beijing se remonta a principios de la década de 1950, durante las primeras etapas del régimen comunista de Mao Zedong, junto con ayuda militar y la intervención directa para difundir la ideología comunista. También formaron parte de este escenario las inversiones en megaproyectos e infraestructuras en el exterior, como en el caso del ferrocarril Tazara que conecta el puerto de Dar es Salaam, en el este de Tanzania, con la ciudad de Kapiri Mposhi, en Zambia. Fue el mayor proyecto chino de inversión extranjera en la década de 1970 y se enviaron miles de trabajadores a las obras de construcción, en las que murieron al menos 64 operarios e ingenieros.
A diferencia de las motivaciones puramente ideológicas de la época, las autoridades de Beijing hoy tienen en cuenta sobre todo las influencias geopolíticas y la carrera por el reconocimiento. China se ha convertido en uno de los mayores proveedores de ayuda, pero respetando el principio de "no injerencia" en los asuntos internos de los países ayudados. Sin embargo, analistas y expertos coinciden en señalar la "falta de transparencia" de los acuerdos que firma Beijing, cuyo volumen también es difícil de calcular. A esto se suma el requisito previo de que el dragón guarde silencio sobre los abusos contra los derechos humanos y la corrupción en los proyectos de infraestructura y, a cambio, los países ayudados defiendan a China en cuestiones sensibles como Taiwán, Xinjiang y el Tíbet.
Las críticas y el descontento con la ayuda al exterior también existen dentro de China, donde la población de bajos ingresos todavía es muy numerosa. Beijing ha publicado tres libros blancos sobre la ayuda al exterior en 2011, 2014 y 2021, pero los montos exactos nunca se han definido y siguen siendo un misterio. En 2020 el Ministerio de Relaciones Exteriores de China anunció que ampliaría la fecha de vencimiento de las deudas contraídas con 77 países, sin proporcionar una lista. Por eso en Internet y en las redes sociales se difundieron comentarios como "tirar dinero" o "comprar apoyo para la política de una sola China", rápidamente censurados y eliminados por el gobierno.
La expansión de la ambiciosa Belt and Road Initiative ha entrado en su décimo año y China sigue promoviendo la estrategia a pesar de las críticas. El Fondo para la Ruta de la Seda creado por Xi Jinping se puso en marcha con 40 mil millones de dólares y en 2017 recibió una nueva inyección de dinero público de 100 mil millones de yuanes (más de 13,7 mil millones de dólares). Un río de dinero, destinado a aumentar en el futuro, para sostener los proyectos en el exterior del presidente Xi.
07/09/2018 11:12
18/02/2019 11:50