Bangladesh, decenas de docentes incitaban al terrorismo islámico: fueron detenidos
La policía dio por cierta la implicación del profesor Hasnat Karim con los atacantes de Dacca. Los investigadores secuestraron varios libros en los que se exaltaba la yihad en la biblioteca de la universidad donde él enseñaba desde 2012. Las ideas extremistas eran difundidas en las academias más prestigiosas de la capital.
Dacca (AsiaNews) – La policía de Bangladesh descubrió que decenas de profesores universitarios y docentes de escuelas secundarias (medias) incitaban a sus estudiantes al terrorismo islámico. Uno de ellos, docente de inglés en una escuela secundaria, habría dicho al vigilante de la escuela: “Los musulmanes son perseguidos en todo el mundo, por lo tanto, debemos llevar a cabo atentados contra quienes no son musulmanes”.
El vigilante, que se mantiene tras el anonimato por razones de seguridad, refiere a AsiaNews: “Cuando se verifican ataques contra las minorías religiosas, muchos musulmanes se ponen felices al saber que cristianos o hindúes han sido muertos por militantes. Los docentes están cometiendo un error grave”.
Tras el dramático atentado terrorista perpetrado en el Holey Aryisan Bakery Café de Dacca, en el cual murieron 20 personas en su mayoría extranjeros, la policía agudizó los controles. En las últimas semanas, las autoridades han recibido decenas de denuncias de desaparición de jóvenes, que muy probablemente hayan escapado para unirse a los militantes islámicos.
Mientras tanto, las investigaciones también se han enfocado en aquellos que pueden haber inspirado un gesto de tamaña violencia, como pueden ser los predicadores y docentes. Entre los últimos están Hasnat Karim, un ex docente de la North South University (NSU) de Dacca. El hombre se encontraba en el bar de Gushan que fue atacado por cinco terroristas el primero de julio pasado, y las imágenes de las cámaras de vigilancia lo capturaron mientras paseaba por el techo del local en compañía de los atacantes.
Esta actitud suya hizo sospechar a las autoridades, que primero lo detuvieron, para luego verificar su implicación en los ataques. En el año 2012 él enseñó en la misma universidad en que estudiaba uno de los perpetradores del atentado, Nibras Islam.
La vinculación entre ambos sacó a flote la cuestión de la difusión de ideas extremistas en las academias del país, incluso en aquellas más prestigiosas. La NSU es uno de los ateneos privados más importantes de la capital, y los expertos dicen que los administradores jamás han prestado mayor atención a las actividades terroristas que se desarrollaban tras sus muros. Hace algunos días, la comisión de investigación dispuesta por el gobierno secuestró de la biblioteca varios libros que exaltaban la yihad.
Al día de hoy, las autoridades ha rastreado a varios docentes que enseñaban la lucha contra los infieles: trabajaban en cuatro universidades privadas y en cuatro escuelas secundarias inglesas de la capital, además de en una universidad pública de Chittagong. La fuente informa que un profesor de Gulshan [el barrio diplomático donde fue llevado a cabo el ataque] alentaba a los alumnos a agredir a fieles no musulmanes. Una docente de escuela secundaria, madre de un joven que ingresó a las filas del grupo islámico ilegal Jamaat-ul-Mujahideen Bangladesh (JMB), también fomentaba la violencia.
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