Bangkok, se inicia el proceso “más grande de todos los tiempos” contra los traficantes de personas
Los imputados suman en total 90, y están acusados de tráfico de seres humanos, de estar involucrados en la crisis internacional y de corrupción. Entre ellos está Manas Kongoaen, ex teniente general del ejército y cercano al premier Prayut Chan o-cha. Grupos en defensa de los derechos humanos denuncian la escasa protección brindada a los cientos de testigos que esperan presentarse en la sede judicial.
Bangkok (AsiaNews/Agencias) – Tailandia le declara la guerra al tráfico de personas: de hecho, está en curso el proceso judicial más importante de toda la historia del país contra los sospechosos de dicho crimen. Los imputados suman en total 90, y entre ellos figura el ex teniente general del ejército, Manas Kongoaen, quien está acusado de haber organizado una red ilegal de explotación y esclavismo en perjuicio de miles de migrantes, provenientes en su mayor parte Myanmar. Otras acusaciones se vinculan con su participación en la crisis internacional y en actividades de corrupción. De ser hallados culpables, los sospechosos arriesgan estar detenidos durante 15 años, además del pago de una multa de un millón de bath (cerca de 28.500 dólares).
La primera audiencia, mantenida ayer, se abrió con el testimonio de Roshiduila, prófugo rohinyá [minoría étnica de fe islámica, que es perseguida en Myanmar, ndr] que, con la ayuda de un intérprete, narró cómo un agente de policía tailandés, Hashimyuila, sería el mayor intermediario de la trata traficada por vía marítima, que de Myanmar llevaba a Malasia haciendo escala en Tailandia.“Hashimyuila nos había prometido a mí y a otros amigos míos que habría trabajo en la industria de la construcción en Malasia, y que cada uno de nosotros ganaría 1500 ringgit (361 dólares) al mes” .
Junto a otros 20 habitantes de su aldea, Roshiduila decide embarcarse. En una escala en las islas Andamán, sin embargo, el grupo es obligado por la fuerza a subirse a unos pesqueros, donde encuentran amasadas a cientos de personas destinadas al trabajo esclavo. Al final del testimonio, la víctima identificó a siete traficantes, que se encuentran en un centro de detención en la ciudad de Ranong (sur de Tailandia).
Las investigaciones de la policía tailandesa, que han sacado a la luz el sistema de tráfico de personas, se iniciaron en mayo de 2015, luego del hallazgo de 32 cadáveres de migrantes indocumentados, sepultados en fosas comunes en la frontera con Malasia. Tras el descubrimiento, Bangkok impuso el bloqueo marítimo de las naves que transportasen migrantes irregulares, impidiéndoles atracar. La política del rechazo, que fue también adoptada por Indonesia y Malasia, causó una lisa y llana crisis humanitaria: miles de “boat people”, rohinyá y bangladesíes, fueron obligados a permanecer durante semanas en embarcaciones abarrotadas de gente y en circunstancias terribles, sin comida ni agua.
Los testimonios serán escuchados en la sede judicial hasta el 18 de marzo. 88 de los 90 imputados han declarado ser inocentes, mientras que la policía considera que otros 61 sospechosos siguen libres. Entre los presuntos culpables, se destaca la figura de Manas Kongoaen, ex teniente general del ejército, promovido por el jefe de la Junta en el poder, Prayut Chan o-cha. Manas es considerado el jefe de la organización que se ocupaba del tráfico seres humanos, y uno de los primeros en obtener beneficios de dicha red.
Hace meses que activistas y grupos a favor de los derechos humanos critican a las autoridades tailandesas, subrayando que un alto oficial como Manas no puede haber actuado solo, y que otros deben ser entregados a la justicia junto a él. Por otro lado, la organización sin fines de lucro “Fortify Rights” denuncia la poca protección brindada por el gobierno a los cientos de testigos que aguardan para declarar en el proceso.
19/03/2018 13:46
18/05/2015