Bangkok, golpe de Estado del ejército. Después de meses de estancamiento, gobierno y reformas a los militares
Bangkok (AsiaNews)- El jefe del ejército thai, general Prayuth Chan-ocha, anunció el golpe de Estado, confirmando que los militares han asumido el poder y control del gobierno del país. En un discurso transmitido por la televisión, el comandante de las Fuerzas Armadas subrayó que los militares "repondrán el orden en el País" e "iniciarán" las reformas políticas desde hace tiempo paralizadas, una situación de estancamiento determinado por la lucha entre el ejecutivo y la oposición, entre las camisas amarillas cerca del partido democrático y las camisas rojas fieles a la familia Shinawatra.
El golpe de mano del ejército llega luego de 2 días de coloquios y tratativas entre las varias componentes políticas que, también en este caso, se concluyeron en nada. Los soldados han clausurado los edificios, que fueron el teatro de los encuentros y han detenido a los líderes de las varias formaciones políticas. Voces no confirmadas refieren de "arrestos" o por lo menos de "detenciones" entre los varios Rojos o Amarillos, pero no se tienen noticias ciertas de dónde están.
Desde hace meses Tailandia estaba atravesando una profunda crisis política, que ha llevado a los militares el 20 de mayo a declarar la ley marcial e imponer una censura en los medios. En estos minutos el ejército está enviando tropas de refuerzo y vehículos acorazados a los lugares de las protestas, para dispersar a la multitud de manifestantes que de hace días presidia las plazas y los lugares símbolos de la capital. Los militares además han impuesto un toque de queda de las 10 de la noche a las 5 de la mañana.
Fuentes católicas de AsiaNews en Bangkok, detrás del anonimato, refieren que la población thai "está acostumbrada a estas situaciones" y "casi se lo esperaba que llegase el golpe de Estado". Después de meses de estancamiento la gente "esperaba la intervención de los militares, para desbloquear esa situación". La voz de un golpe de mano de las altas esferas de las Fuerzas Armadas "estaban en el aire", por un poco de tiempo, prosigue la fuente, los oficiales "han dejado que las cosas fueran así, hasta que se vio con claridad que nadie había puesto ninguna buena voluntad ni intenciones para sentarse a discutir para llegar a un acuerdo". Los problemas no se resolverán por un golpe de estado, concluye la fuente, pero por algunos meses "se podrá respirar". Sin embargo, el conflicto verdadero irá adelante sumergido y los problemas no serán resueltos".
La crisis político-institucional en la segunda y más importante economía asiática precipitó en diciembre pasado, cuando al primer ministro Shinawatra-acusada por sus detractores de ser un "títere" en manos de su hermano Thaksin, multimillonario exilado para escapar de una condena de 2 años por corrupción-disolvió el Parlamento y llamó a nuevas elecciones anticipadas. En los primeros días de mayo un tribunal ordenó la remoción de la primer ministro por abuso de poder, la Shinawatra está además investigada por un sistema de subsidios para la producción de arroz querido por el gobierno, que habría dejado un agujero de billones de dólares en el balance estatal. Los opositores piden reformas políticas, nuevas elecciones y "el fin del régimen Thaksin", los cuales por otro lado han ganado las elecciones políticas desde el 2001 y hoy pueden contar con un vasto apoyo popular en el norte y el nordeste.