Auxiliar de Bagdad: reforma de la Constitución, para tutelar derechos y libertad religiosa en Irak
Bagdad (AsiaNews)- “Es necesario ir a la Constitución, porque está en el interior de la Carta, donde debe hacerse claridad sobre los derechos y sobre las libertades individuales. Pero por el momento es difícil que cambie algo y hay una sensación difundida de pesimismo”. Así mons. Shlemo Warduni, obispo auxiliar de los caldeos de Bagdad, comenta las últimas noticias de crónica, que confirman una situación de libertad religiosa negada en Irak. En los días pasados, Mar Louis Raphael I Sako envió una carta al Parlamento iraquí en la cual pide que se modifique la ley en base a la cual un menor es registrado como musulmán en el caso uno de sus padres se convierta al islam.
Para el Patriarca caldeo la norma es contraria al Art 37-2 de la (controvertida) Constitución, según la cual “el Estado garantiza la protección del individuo de toda forma de coerción intelectual, política y religiosa”. La ley es “injusta y discriminatoria” contra los cristianos, además de ser una evidente “forma de persecución” Él pidió la modificación de la ley, para que el menor pueda conservar la religión de pertenencia hasta la mayoría de edad (18 años). A este punto será el mismo joven que elegirá cual religión profesará, en modo consciente y libre.
Sin embargo, a la carta de Mar Sako- el cual recuerda también que los cristianos respetan la libertad de cambiar religión, si es fruto de una elección personal- llegó la réplica de un miembro del Comité para la seguridad y la defensa, al cual fue enviado la apelación. Se trata del diputado Ammar Tu´ma, el cual rebatió que considerar tal ley como “discriminatoria y persecutoria” está en contrasto con el hecho que también quien está registrado los es “durante la minoría de edad”.
Interpelado por AsiaNews, mons. Warduni advierte que sólo yendo a las raíces del Estado y a las normas que fijan la convivencia común, será realmente posible ver reconocidos y sancionados “los derechos de todos los ciudadanos”. Y no, como sucede ahora, de hipotéticas garantías o tutelas “para las minorías”. “La batalla contra esta ley- dice el prelado, que ya en el año 2002 había denunciado las torturas- dura de hace más de 30 años y ve comprometido a todo el clero cristiano de Irak”.
La controvertida norma fue aprobada en los años en los cuales estaba en el poder Saddam Hussein, quizás para complacer a una franja extremista islámica que ya se asomaba al panorama político e institucional. “No sé cuáles sean las verdadera motivaciones que han llevado a la aprobación de la ley- afirma el prelado- pero la única certeza es que es aplicada con rigor y no fue posible modificarla. Con su carta, Mar Sako recordó que esta no sea la verdadera libertad y ha querido pedir a los gobernantes y a los responsables que pongan atención, de otro modo el país arriesga hundirse”.
Irak puede ser salvado, “no con las ramas, sino a través de leyes justas”, agrega el vicario de los caldeos y esta ley “es contra la libertad y la conciencia”. “Por esto cada uno debe hacer su propia parte y obrar en el espíritu de libertad verdadera y de la igualdad”. “Por otro lado, sólo la ciudadanía y no la pertenencia religiosa- concluye el prelado- podrán salvar a Irak. Y nosotros apoyamos esta batalla, no por las minorías sino por todos los ciudadanos que están llamados a construir la unidad de la nación# (DS).
30/09/2014