Arzobispo de Bassora: la visita del Papa, ocasión de renacimiento para los cristianos y para IraK

de Alnaufali Habib Jajou*

El país está aún “a pedazos” a causa de la corrupción difundida. Insuficiente las intervenciones del gobierno para asegurar los derechos a las minorías y levantar a la nación. Mayor compromiso para contrarrestar el odio y el terrorismo. La presencia de Francisco es una ocasión para renacer, pero debe existir un mayor compromiso en tema de derechos, instrucción, desarrollo y ciudadanía.

Bassora (AsiaNews) - La visita del Papa Francisco a Irak, prevista para el próximo año, representa una vidriera para el gobierno de Bagdad para mostrarse cercano a los cristianos y activo en la defensa de las libertades y de los derechos de toda la población. Porque hasta ahora, la dirigencia ha hecho poco o nada para aliviar “los sufrimientos” de la comunidad local y “la situación sigue siendo un desastre”. Es cuanto cuenta en una reflexión confiada a AsiaNews por el arzobispo caldeo de Bassora Mons. Alnaufali Habib Jajou, según el cual la nación “está en pedazos” a causa de una “corrupción que se ve por todas partes”.

Bassora es el centro más importante del sur de Irak y fue teatro en el reciente pasado de graves violencias, que habían llevado a la Iglesia a suspender todas las actividades extra-pastorales. Para que el viaje sea realmente una ocasión para renacer para los cristianos y para el país, el prelado indica “algunos puntos” y “cuestiones irresueltas” sobre las cuales “el gobierno debe trabajar”.

A continuación, la reflexión que Mons. Habib Jajou confió a Asianews:

(Nosotros los cristianos) debemos ser iguales en dignidad y derechos con los otros ciudadanos iraquíes. Demasiadas veces hemos visto como los cristianos son tratados y considerados ciudadanos de segunda clase. Algunas veces hasta como infieles. Por esto es necesario impedir la formación de una ciudadanía de Serie B, en especial modo para los cristianos y las otras minorías que son afectadas y relegadas al margen de la Constitución y de la cultura sectaria. De tal modo que la desigualdad y los límites ínsitos en la actual ley sean afrontados y resueltos: porque es al derecho que le toca siempre dar la última palabra.

Es necesario garantizar una verdadera libertad de celebrar las festividades religiosas, las nacionales y las personalidades relacionadas con el culto. Es necesario preservar el lenguaje, las tradiciones, los santos, los patronos de las iglesias y poder rendirles homenaje. Y en estas ocasiones sería deseable una adecuada cobertura en los medios nacionales y en las principales emitentes televisivas.

Las instituciones religiosas tiene la responsabilidad, en primera persona, de hablar de justicia, igualdad y dignidad humana. Y, en sus tareas deberían ser alentadoras por el Estado civil y por las máximas autoridades.

Es necesario un monitoreo constante y atento hacia cuántos fomentan el odio, las divisiones y discriminaciones, trabajando para afrontar y frenar estas derivaciones irracionales. Y trabajar para dar vida a una legislación que realmente castigue a las organizaciones y a los individuos que financian el terrorismo y alientan la violencia.

Es necesario dar una mejor sistemación y alojamientos dignos. Si hubiese un compromiso común finalizado a la realización de pequeños departamentos para los pobres, estos últimos elegirían permanecer en vez de emigrar. Y además de esto van apoyados aquellos estudiantes que deciden continuar, para mejorar su nivel de instrucción.

Promover oportunidades de trabajo, evitando que se puedan subentrar discriminaciones de parte de entidades gubernamentales o partidos islámicos. Cada proyecto de naturaleza económica debe ser controlado en modo riguroso.

Además es necesario corregir los defectos ínsitos en la relaciones entre cristianos y musulmanes, en especial modo en los casos de matrimonio y de heredad. La ley sobre el estado personal, en el artículo 26, prevé que “los niños deben seguir la religión del padre que se convierte al islam”. Esta representa un abuso hacia los otros credos, porque se aplica a los menores en lo casos en los cuales su madre no musulmana se case con un hombre musulmán o si ambos padres se convierten al islam. Los niños deben poder tener el derecho de elegir su religión. Y si los padres ignoran la ley y crecen a los niños en aquella, cuando cumplen 18 años deben afrontar el hecho que ellos se convierten en modo automático en musulmanes. En caso contrario, ellos son acusados de apostasía y así se convierten en objeto de persecuciones.

El Art. 2 de la Constitución establece que el islam es la religión oficial del Estado, representa una fuente de derecho y ninguna ley puede ser aprobada y aplicada si contradice los dictámenes del islam. Al mismo tiempo, el artículo afirma que no pueden ser aprobadas leyes que contradigan los principios de la democracia.

En tema de derechos, es necesario promover iguales oportunidades entre hombres y mujeres, proteger la dignidad de las mujeres y los niños.

Luego es necesario renovar los curriculum educativos y escolares, para que promuevan la igualdad religiosa y el perdón. La historia cristiana está completamente ausente en los libros de texto utilizados en los institutos educativos del país.

A esto se agrega la fundamental obra de reconstrucción de las infraestructuras, para conseguir un verdadero crecimiento económico. Esta exige verdaderos planes educativos, que eleven a la sociedad a un nuevo nivel. Y es vital poner la atención sobre la unidad nacional, sobre la ecua repartición de las riquezas y sobre la implementación de buenas políticas en tema de derechos humanos. Además, es imperativo tener en cuenta todas las lenguas étnicas y los derechos sociales de las minorías. Nos batimos por una nación en la cual, juntos, sus habitantes construyan una vida común basada sobre la camaradería entre las varias partes.

Y al final, deseamos la igualdad en la gestión de los asuntos locales, sobre todo en los que se refiere a la llanura de Nínive donde la mayoría de sus habitantes es cristiana.

* Arzobispo caldeo de Bassora