Amenazas a una pareja: ella es musulmana y “no debe amar” a un cristiano

de Shafique Khokhar

Los jóvenes están casados con rito interreligioso y mantienen cada uno su propia fe. Sin embargo, los parientes de la joven hostigan al matrimonio y acusan a los cristianos de rapto. La pareja está obligada a vivir en una localidad secreta. Enfrentó un proceso y su matrimonio fue declarado ilegal.

Faisalabad (AsiaNews) – Una joven paquistaní está obligada a vivir en una localidad secreta por las amenazas recibidas por parte de la familia de la joven. Los parientes de “T” (indicada sólo con la inicial del nombre por motivos de seguridad, ndr), la esposa de 19 años, rechazan la decisión de la hija, que se casó libremente y sin constricciones a un joven cristiano, Akash Maish de 20.

Los cónyuges se casaron con un rito interreligioso y cada uno mantiene su propia fe, pero los parientes de “t” acusan a los cristianos de secuestro. A AsiaNews, Naveed Walter, presidente de Human Rights Focus Pakistan (HRFP), denuncia “los religiosos islámicos facciosos que imparten enseñanzas basados sobre el odio y crean el extremismo religioso contra las otras religiones”.

Los 2 jóvenes se encontraron por casualidad en un curso académico y se enamoraron. Decidieron casarse con un rito interreligiosos, cada uno manteniendo el respectivo credo y rezando según la propia religión. El matrimonio se celebró el 28 de agosto pasado y fue comunicado a las familias el día después.

Conocida la noticia. los padres de “T” expusieron una denuncia por rapto; luego ayudados por religiosos y la policía allanaron la casa de Akash y de la casa de unos amigos en busca de la pareja. Los agentes han arrestado y torturado a la madre del joven, a su hermano mayor y a 2 tíos.

La madre y el hermano más grande permanecieron en la cárcel en espera de juicio. Al final, gracias al apoyo legal de HRFP, la mujer obtuvo la liberación bajo caución el 6 de noviembre; el hijo pocos días antes, el 31 de octubre.

Mientras tanto, la policía continuó investigando y buscando a la pareja. Finalmente ambos fueron “capturados” en Karachi, a unos 930 Km de distancia de Faisalabad (lugar de origen) y llevados a la cárcel distrital el 18 de noviembre. A fin de mes comparecieron delante del juez: en aquella ocasión, “T” reafirmó que se había casado en manera consciente a su amado, que no fue raptada ni forzada en ningún modo y que continúa profesando el islam y a rezar al profeta. Luego agregó estar muy feliz con su marido.

Los jueces dispusieron la liberación porque el hecho no subsiste y el matrimonio de la pareja es legal. Por el momento viven escondidos, porque la familia de “T” no se resigna a verla feliz con un hombre cristiano y continúa las investigaciones. Naveed lamenta: ¿Por qué sólo los hombres musulmanes pueden casarse con jóvenes cristianas, hindúes, sijs y de otras minorías?”.

Según el activista, “los problemas surgen sólo en el caso en el cual los matrimonios sean forzados”, como todos los casos de rapto y conversiones forzadas al islam de menores de las minorías. “Pero, cuando ambos esposos son adultos y el matrimonio es consensuado-prosigue- esto debe ser aceptado. Si la Constitución permite los matrimonios mixtos, ¿por qué el gobierno no protege a las parejas y a las familias?”

Naveed critica la prontitud de la policía, “que inmediatamente se moviliza en la búsqueda de la pareja cuando la joven es musulmana. En cambio las jóvenes de las minorías siguen aún desaparecidas y la policía y hasta los tribunales cierran los procedimientos por miedo a las venganzas de los radicales”.