Alerta en Tailandia: las milicias del Estado islámico listas para atacar objetivos rusos

Los servicios de seguridad de Moscú han alertado a los colegas de Bangkok; en las pasadas semanas al menos diez ciudadanos sirios habrían atravesado la frontera del país. En la mira los turistas rusos que se dirigen a Pattaya, Phuket y a la capital. Hasta ahora Tailandia fue ahorrada por el terrorismo internacional, pero sube el nivel de atención.

Bangkok (AsiaNews/Agencias)- Los servicios de seguridad de Moscú han advertido a los colegas tailandeses sobre el “elevado riesgo” de atentados contra “intereses” y “objetivos” sensibles rusos, en las zonas turísticas y de vacaciones del país por parte del Estado islámico (EI). Según lo que refieren los expertos del Kremlin, en las semanas pasadas al menos diez milicianos originarios de Siria han atravesado la frontera de Tailandia, mientras el país se prepara para inaugurar la temporada alta de la estación turística. En la mira estarían los ciudadanos rusos que, en breve, invadirán las playas de la nación asiática, en particular las localidades de Phuket y Pattaya, además de la capital, Bangkok.

El 30 de septiembre pasado Moscú inició ataques aéreos contra objetivos sensibles de Daesh (acrónimo árabe para el EI) en Siria, que han registrado un aumento en las últimas semanas; en respuesta, los yihadistas han amenazado con ataques contra ciudadanos e intereses rusos en el mundo. Y estaría en manos del EI el estallido de un vuelo de línea ruso en los cielos de Egipto en octubre pasado, en el cual murieron 224 personas.

Songopol Watthanachai, vocero de la policía, explica que “por el momento, no se trata más que de un intercambio de informaciones” transmitidas por el FSB (ex KGB) y que aún están “a la espera de ser verificadas”. La nota interna de las fuerzas de seguridad está fechada el 27 de noviembre y está clasificada como “confidencial” y “urgente”. “El FSB nos pone en guardia- continúa el policía- contra un posible ataque del EI, que quiere atacar objetivos rusos en Tailandia”.

Durante las festividades de Navidad y Año Nuevo se registra el pico de la estación turística para Tailandia; muchísimos ciudadanos rusos desembarcan de numerosos vuelos chárter que despegan desde las ciudades rusas rumbo al país asiático. Entre las metas preferidas están las playas de Pattaya, a unas dos horas de camino de Bangkok.

Sería esa la zona, según lo referido por la policía tailandesa, en la cual se establecieron “diez sirios ligados al EI, que habrían llegado a Tailandia entre el 15 y el 31 de octubre de 2015”. Otras zonas sensibles serían la capital y Phuket. Sin embargo, no hay confirmaciones de ciudadanos tailandeses o de musulmanes presentes en el territorio que se hayan unido a las milicias del Isis, a diferencia de cuanto sucedió en otras naciones de la zona, entre ellas, Malasia e Indonesia.

En agosto un atentado golpeó el centro de Bangkok, provocando unas veinte víctimas, en el contexto de un ataque sin precedentes en la historia de Tailandia. Hasta hoy, no hay reivindicaciones oficiales del gesto y asimismo, los arrestos realizados por la policía presentan aristas poco claras. La pista oficial lleva en dirección a los milicianos uighuros, minoría musulmana del oeste de China, en la región de Xinjinag, pero quedaron muchos nudos sin resolver.

Hasta ahora, Tailandia se había ahorrado el terrorismo internacional y, en particular, los episodios de violencia del Estado islámico. En el sur del país están activos movimientos rebeldes independentistas filo-islámicos, quienes en el pasado fueron protagonistas de ataques y hechos de violencia, pero su lucha no tiene ninguna relación con los movimientos yihadistas y terroristas internacionales.