"Adopta un cristiano de Mosul": el agradecimiento del Patriarca Louis Sako; las preocupaciones del obispo de Kurdistán
Roma (Asianews) -
"Adoptar un cristiano perseguido
y expulsado de su casa a causa de Cristo vale
la pena": Así lo afirma el
Patriarca caldeo de Bagdad, Louis Sako en un
mensaje a AsiaNews,
con motivo de la campaña "Adopta
un cristiano de Mosul", después
de las amenazas y los asesinatos del
Califato islámico y la huida de los cristianos en el noreste irakí. "Con mucha
gratitud y emoción - escribe el Patriarca
- agradezco por esta
iniciativa, así mismo a AsiaNews
por la ayuda y la
solidaridad con los cristianos de Irak en su alarmante situación".
Y añade: "Espero que esta cadena de solidaridad se alargue. Ellos [los cristianos]
necesitan de todo. Hay muchos niños,
enfermos y ancianos. El Señor Jesús
los bendiga y los
llene de su gracia".
También monseñor Rabán Al-Qas, obispo de Amadiya,
en el Kurdistán, que junto con otra diócesis está
aceptando decenas de miles de
prófugos de Mosul, Qaraqosh y Ankawa,
agradeció a "los que piensan
en nosotros y están buscando maneras de ayudar". "La
campaña de AsiaNews - continúa
- es un paso
positivo, porque quiere ayudar a
los cristianos en el lugar y no
hacerlos huir a otro lugar.
Desafortunadamente para muchos el escape
sigue siendo la solución mejor, hacen
los documentos y se van. Ayer 150 personas han partido a Turquía, a bordo de tres autobuses. ¿Cuál es el destino que nos espera y cuál será el futuro para nosotros? La llanura de Nínive está vacía y
no hay más cristianos".
"Las personas - dijo monseñor Rabban
- se han ido por el miedo; la fuerza de los terroristas es tan grande, y tuvieron
miedo, especialmente por las mujeres y las niñas, dado los
rumores que circulan por la violencia de los islamistas. La Diócesis se ha organizado con padres y sacerdotes proporcionando las
casas vacías para dar cabida a las familias desplazadas. Nosotros ayudamos a estas personas dándoles bolsas con alimentos.
Ahora los esfuerzos se centran en la distribución de
la ayuda".
Los refugiados son cientos de miles y sólo la diócesis de Amadiyah no es suficiente
para contenerlos. Por esta razón,
en el Kurdistán iraquí se están
preparando otros puntos de
recepción.
"No tenemos miedo - continua el obispo -
y tratamos de hacer nuestro mejor esfuerzo para darle comodidad no sólo
a los cristianos, sino también a los árabes que huyen de Tikrit, y
los yazidies, sin distinción de naturaleza religiosa. A los
sacerdotes también les indicamos no mirar a las diferencias confesionales y nunca pedir
nada a cambio de sus esfuerzos.
Debe ser una ayuda gratuita, de
acuerdo con las enseñanzas del Evangelio".
"La situación - agregó - es muy
delicada, incluso si el esfuerzo
es grande y la Iglesia lleva a cabo su función, con gran eficiencia. La Iglesia caldea está viva, activa, y da
testimonio de nuestra presencia con amor. También
los kurdos llevan ayuda sin diferencias; los líderes religiosos locales
piden promover la tolerancia y el amor, y están listos para ayudar".
"La mayoría de los cristianos
- confiesa monseñor
Rabban -. Quiere
hacer los documentos para irse, desaparecer, porque tienen miedo. Son miles de cristianos que quieren escapar y el futuro de la llanura de Nínive tendrá un negro
futuro: ya no será segura,
será inhabitable.
El gran problema de Bagdad es la falta
de un gobierno, la crisis de
seguridad y luego está el fanatismo de Arabia Saudita
y Qatar, que prepararon esta situación: lo que vemos ahora es el resultado de sus maniobras, primero en
Siria y ahora aquí en Irak.
Para ellos no existe el camino de la
tolerancia".
Para la modalidad de las donaciones, v. aquí.
08/08/2014