Disidente vietnamita: Hanoi usa los presos políticos como moneda de cambio en las negociaciones
Washington (AsiaNews) - Estaba obligado a firmar un documento en el que pedía "perdón"
por sus (presuntas) actividades de "propaganda contra el Estado", luego
se le metió a bordo del primer vuelo a los Estados Unidos, con sólo la ropa que
llevaba puesta a la salida de la cárcel. Así es como el gobierno vietnamita ha "indultado" y puesto en
libertad el blogger y activista Nguyen Van Hai, más
conocido por su apodo de Dieu Cay, que fue condenado a 12 años de prisión en
septiembre de 2012 por la promoción de actividades subversivas. De hecho, en
lugar de ser puesto en libertad, debido a un acto de clemencia, confirmó en una
entrevista con la AP que se trataba de una medida gubernamental de "expulsión"
y "deportación" para un largo exilio en territorio americano.
Al salir de la cárcel, Nguyen Van Hai de 62 años, ha puesto una férrea resistencia
y se negó a firmar el documento presentado por las autoridades; él siempre ha
afirmado su inocencia y también la última fue la intención de confirmar que no
ha cometido ningún delito. Hanoi no querido dejarle otra alternativa que abandonar
su país para un exilio forzado en Estados Unidos.
"Me llevaron de la cárcel al aeropuerto internacional de Hanoi", dice
la AP, "escoltándome hasta el
avión. No me han dejado ver a mi familia antes de la salida. No podemos hablar de
la liberación. Si me hubieran restaurado la libertad, yo podría ir a casa en
vez de ir al aeropuerto, sin despedirme de familiares o amigos".
En el momento de la liberación, el 21 de octubre, Hanoi ha hablado de la
liberación por "razones humanitarias". Y un portavoz del Departamento
de Estado dijo que ha sido el deseo mismo de Dieu Cay viajar a los EE.UU.
Nguyen Van Hai acoge con satisfacción el liberar algunos presos políticos de las
cárceles Vietnamitas en los últimos tiempos, pero tiene serias dudas acerca de las
razones de las medidas. No es aceptable, dice, que el gobierno vietnamita use los
presos políticos como "moneda de cambio en las negociaciones diplomáticas".
Espero, agrega, que todos los gobiernos que tratan con Hanoi "pongan la
democracia y otros derechos civiles como una condición" absoluta para ser respetado.
Hace tiempo en Vietnam hay una campaña dura contra los disidentes del gobierno,
los bloggers, los líderes religiosos (incluyendo budistas), activistas católicos
o comunidades enteras como sucedió en la diócesis de Vinh, donde no se ha
repetido ataques contra obispos y fieles. La represión
también afecta a las personas culpables de reclamar el derecho a la libertad religiosa
y el respeto a los derechos civiles de los ciudadanos. Sólo en 2013, Hanoi ha detenido
a decenas de activistas por delitos "contra el Estado", de acuerdo a una
regla que los grupos de derechos a favor de los humanos han calificado como "genérico"
y "vago".