Sanaa: kamikaze contra base chií, 15 muertos y más de 50 heridos
Sanaa (AsiaNews/Agencias)- Aumentó a 15 el número de las víctimas de un atentado suicida ayer en la ciudad de Majzar, en la provincia de Maarib, al este de Sanaa, capital de Yemen: un kamikaze ligado a al-Qaeda, a bordo de un coche-bomba, atacó en hospital utilizado como base logística y operativa por los rebeldes chiíes del movimiento Houthi, que en las pasadas semanas han asediado la capital y obtenido la formación de un nuevo gobierno. El 21 de septiembre pasado el grupo rebelde conquistó amplias zonas de Sanaa y algunos edificios de importancia estratégica, entre los cuales algunos edificios gubernamentales y la tv de Estado, después de 4 días de combates con las tropas suníes de Islah. A despecho de un acuerdo firmado con el presidente yemenita Abd-Rabbu Mansour Hadi, para entrar a formar parte de la nueva coalición de gobierno, los milicianos chiíes no tienen intención de abandonar la capital.
En un comunicado difundido en las últimas horas por el movimiento islamista suní, afiliado a la red de al-Qaeda en la Península arábiga (Agap), los militantes reivindican "decenas de muertos y heridos" pertenecientes al grupo Houthi. Se trató de "un hecho de martirio" a obra de un militante de "Ansar al-Sharía, que se hizo explotar "dentro de un coche-bomba lleno de explosivos".
El grupo islamista agrega que el objetivo era el hospital de al-Jafra, transformado por los combatientes Houthi en base operativa de la provincia de Marib. Según algunos tribales de la zona, además de los 15 muertos habría también más de 50 heridos, algunos de los cuales en graves condiciones. Por el momento no hay declaraciones oficiales por parte de los oficiales de los líderes Houthi.
Después de haber atacado por largo tiempo las posiciones militares y civiles de EEUU, aliados del gobierno de Sanaa, los milicianos suníes de Ansar al-Sharía han desviado su atención hacia los rebeldes chiíes, considerados heréticos. La semana pasada éstos habrían atacado a los Houthi en la provincia septentrional de Sadaa, considerada el bastión de los rebeldes chiíes.
En un cuadro medio-oriental caracterizado por violencias y focos de guerra, para Washington y los Países árabes la estabilidad de Yemen es una prioridad, por la cercanía con Arabia saudita y la presencia de rutas comerciales marítimas (a través del Golfo de Aden) de importancia estratégica. En una intervención de ayer en la Onu del príncipe saudita Saud al-Faisal, ministro de Relaciones exteriores de Riad, afirmó que la situación de Yemen representa un "desafío sin precedentes" y constituye una "amenaza" a la seguridad internacional. Además agregó que el acuerdo dirigido al nacimiento de un nuevo ejecutivo naufragó porque los Houthi se negaron a "abandonar las zonas controladas en la capital".
17/12/2016 13:14