“Monumentos de misericordia” en Guwahati: becas de estudio para los estudiantes meritorios

Mons. John Moolachira habla de las iniciativas puestas en acto en respuesta al llamamiento del Papa Francisco. Desde hace años, la diócesis financia los estudios de algunos jóvenes. De ahora en más, el compromiso se volverá regular. Aquellos que superen el examen de la 10mo grado con buenas calificaciones, recibirán subsidios hasta el tercer año de la universidad. Hay también una contribución económica de 2.600 euros para los catequistas; la construcción de escuelas en las aldeas distantes de los grandes centros urbanos.

Guwahati (AsiaNews) – Apoyar a los estudiantes meritorios en su itinerario escolar, a través de becas de estudio financiadas por la arquidiócesis. Es el objetivo del nuevo programa implementado en Guwahati, en el Estado indio de Assam, en respuesta al llamamiento hecho por el Papa Francisco a fundar obras de misericordia en todas las diócesis del mundo. Mons. John Moolachira, el arzobispo, habla a AsiaNews con entusiasmo acerca del constante trabajo de la Iglesia católica local en favor de los jóvenes. La mayor parte de ellos, explica el prelado, “es pobre. Hace años que la diócesis apoya a jóvenes de las parroquias, financiando de forma parcial sus estudios superiores. Pero desde ahora, este apoyo se volverá un compromiso regular de nuestro trabajo pastoral”.

Mons. Moolachira explica los aspectos del programa dirigido a los jóvenes: “Aquellos que hayan superado los exámenes del 10mo grado con buenas calificaciones, recibirán el subsidio para los grados 11mo y 12mo. De ahora en más, cada año financiaremos un grupo de al menos cinco alumnos, pagando sus estudios desde el 11mo grado hasta el tercer año de la universidad”.

El sistema escolar de grados en la India es más complejo que el sistema occidental: en los primeros cuatro grados asisten estudiantes que van de los 6 a los 9 años de edad; de quinto a séptimo son los llamados grados “medios”; del octavo al décimo toman el nombre de “liceo inferior”. Para aprobar propiamente el liceo (del 11mo al 12mo grado), los estudiantes deben rendir un duro examen, similar al examen de graduación del bachillerato. Si el estudiante es promovido, puede inscribirse en el liceo, el cual, no obstante, acepta un número limitado de alumnos.

Para sortear la falta de estructuras escolares, explica el obispo, “estamos ampliando nuestras escuelas, así como el número de las escuelas parroquiales. Sin embargo, la falta de recursos es siempre un gran desafío. Cada año intentamos construir una o dos escuelas en aquellas aldeas que están muy distantes de los centros habitados o de nuestras escuelas parroquiales”.

“El compromiso en la educación de los jóvenes –continúa- ha sido inmediatamente advertido como una necesidad imperiosa para la diócesis, incluso antes del llamamiento del Papa”.

Durante el Año de la Misericordia, durante el cual la arquidiócesis también festejará el 25to aniversario de su fundación, el obispo ha decidido además donar 200.000 rupias (poco más de 2.600 euros) a cada catequista. Mons. Moolachira concluye: “La suma servirá para construir, reparar o ampliar sus viviendas. La mayor parte de ellas es pobre. Queremos ayudarlos de alguna forma, incluso si bien nuestra contribución no es enorme”.