Vinh, vigilia diocesana por las víctimas del desastre ecológico provocado por Formosa Group

de J.B. An Dang

El gobierno vietnamita ha reconocido que el desastre de 2016 mató cuando menos 115 toneladas de peces de mar, 140 toneladas de peces de piscifactorías y 67 toneladas de almejas. Siguen desocupados los pescadores de las provincias costeras. Como gesto de paz, en la parroquia de My Khanh se llevó a cabo una adoración eucarística por las familias divididas a causa de la migración económica.

Hanói (AsiaNews) – Anoche, en respuesta al llamamiento efectuado por la Comisión Justicia y Paz, las parroquias de la diócesis de Vinh, en la provincia de Nghệ An, organizaron una vigilia de oración por las víctimas del desastre ecológico provocado por la compañía taiwanesa Formosa Plastics Group. Además de Nghệ An, son cuatro las provincias del centro de Vietnam que todavía hoy siguen portando los daños visibles provocados por el imponente derrame de líquidos tóxicos del mes de abril de 2016: Ha Tin, Quang Binh, Quang Tri y Thua Thien-Hue.

El gobierno vietnamita ha reconocido que la contaminación de las aguas provocó la muerte de cuando menos 115 toneladas de peces de mar, 140 toneladas de peces de piscifactorías y 67 toneladas de almejas. Sin embargo, los expertos declaran que las cifras reales son mucho mayores que éstas, puesto que no se contemplan las toneladas de camarones, calamares y otros productos de pesca que se han perdido. El derrame de efluentes tóxicos ha dejado desocupados a los pescadores de las provincias costeras. La diócesis de Vinh ha sido la más fuertemente golpeada por las consecuencias de la catástrofe.

A pesar de las amenazas de las autoridades locales, el Pbro. Đặng Hữu Nam organizó, como gesto de paz, una adoración eucarística en la parroquia My Khanh (foto) para rezar por las “familias dispersas”, cuyos miembros deben dejar todo para migrar a las grandes ciudades, en busca de trabajo. El padre Đặng Hữu Nam es uno de los sacerdotes que, a principios de mayo de 2016, fueron denunciados por el gobierno vietnamita, tras haber organizado protestas contra la empresa Formosa. La compañía taiwanesa depositó 500 millones de dólares estadounidenses para remediar los daños provocados en el ambiente y a los habitantes, pero la lenta e irregular distribución de fondos por parte del gobierno ha provocado que las protestas se mantengan, habiendo pasado casi dos años de los hechos.

El 5 de abril pasado, siendo que las autoridades comunistas intensificaron la represión de los disidentes en ocasión del aniversario del desastre ambiental, el tribunal de Hanói inició un proceso contra seis activistas de un grupo a favor de la democracia, denominado Hermandad por la Democracia. Ellos están acusados de “llevar adelante actividades orientadas a derrocar el Estado”. El conocido abogado por los derechos humanos Nguyễn Văn Đài y otros cinco imputados organizaron campañas en favor de las víctimas de la injusticia, y en apoyo de la libertad religiosa y de los prisioneros políticos y sus familias. El tribunal de Hanói ha infligido condenas contra los activistas que suman 66 años de prisión y 17 años bajo arresto domiciliario.