Turquía, dos años de cárcel para el monje asirio procesado por un pedazo de pan
El padre Aho tendrá que cumplir 25 meses de cárcel porque es culpable de haber prestado "ayuda a una organización terrorista". El religioso, ausente de la sala, siempre ha rechazado todas las acusaciones. Los jueces impidieron el acceso a fieles y periodistas. Desde Santa Sofía hasta el monje asirio, crece la represión de Ankara contra los cristianos.
Estambul (AsiaNews) - El poder judicial turco condenó hoy al monje asirio Sefer (Aho) Bileçen a dos años y un mes de prisión porque lo declaró culpable de proporcionar "ayuda a una organización terrorista". Acabó en el banquillo, acusado de terrorismo, por haber dado un trozo de pan a dos personas que se habían presentado a las puertas del monasterio y según el fiscal del Tribunal Penal Superior de Mardin eran miembros del movimiento proscrito del PKK.
El religioso, ausente de la sala de audiencias, siempre se ha declarado inocente, rechazando todas las acusaciones.
Más conocido como "Padre Aho", el custodio del antiguo monasterio sirio ortodoxo de Mor Yakup (San Jacob, abandonado después del genocidio de 1915 y restaurado por el mismo religioso) fue arrestado el 9 de enero de 2020, pero recuperó la libertad cuatro días después por la presión de la opinión pública. Según la acusación, el sacerdote es culpable de "pertenecer a una organización terrorista", el Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) que Ankara considera fuera de la ley.
El sacerdote fue detenido en base al testimonio secreto de un desertor y ex miembro del PKK, que presuntamente lo denunció a las autoridades turcas. Por otro lado, el padre Ahò siempre insistió en que no conocía a las personas que venían a verlo para pedirle comida, que no sabía que eran "miembros del PKK" y que los ayudaba “por caridad cristiana". En la audiencia de hoy, vedada a los periodistas como las anteriores, el monje Aho fue condenado por los jueces a dos años y un mes de prisión por "ayuda a una organización terrorista".
La condena se produce en un contexto interno creciente de violaciones y abusos contra la minoría cristiana. Las autoridades pusieron recientemente en venta por Internet una iglesia armenia centenaria, el último de una serie de episodios que muestran el comercio del patrimonio religioso y cultural, como la barbacoa en la histórica iglesia armenia de Sourp Asdvadzadzi y la conversión en mezquitas de las antiguas basílicas cristianas - que eran museos desde principios del siglo XX con Ataturk - de Santa Sofia y Chora.
Decisiones controvertidas coherentes con la política de "nacionalismo e islam" del presidente Recep Tayyip Erdogan para ocultar la crisis económica, la emergencia del coronavirus y mantener el poder. En ambos casos, las autoridades islámicas han cubierto con telas blancas las imágenes de Jesús, frescos e iconos que revelan el origen cristiano de los edificios.
29/09/2020 12:23