Televisión china: el boicot de Occidente nos perjudica en Xinjiang

Debido a la caída en las compras de algodón, se registran pérdidas de cientos de millones de yuanes. Los uigures y otras minorías musulmanas son explotadas en campos de trabajo forzado. El fracaso de la campaña contra las marcas estadounidenses y europeas que no compran algodón local. Venden zapatillas Nike en el sitio de comercio electrónico fundado por el multimillonario Jack Ma.

Beijing (AsiaNews) – Los productores de algodón de Xinjiang están sufriendo importantes pérdidas a causa del boicot de Occidente. Así lo informó la televisión estatal China Central Television (CCTV). Desde el año pasado, muchas multinacionales de la industria indumentaria dejaron de comprar algodón de la región autónoma china, temiendo que provenga del trabajo forzado de uigures y otras minorías de habla turca y fe islámica.

Lo cierto es que los ataques orquestados por organizaciones estatales y medios de comunicación chinos contra las marcas estadounidenses y europeas no han logrado resultados concretos. Los consumidores chinos siguen comprando productos occidentales, lo que demuestra que una parte de la población no se alinea con las directrices del régimen.

Según datos de expertos, confirmados por las Naciones Unidas, las autoridades chinas retienen en campos de concentración -o han mantenido recluidos- a más de un millón de musulmanes de Xinjiang (el "Turquestán Oriental", como lo denomina la población islámica). Recientemente los medios de comunicación revelaron la existencia de campos de trabajo en la región, donde cientos de miles de uigures, kazajos y kirguises son empleados por la fuerza. Se los utiliza fundamentalmente para la cosecha del algodón.

Los chinos desmienten todas las acusaciones, y afirman que los sitios de Xinjiang son centros de formación profesional y proyectos para la reducción de la pobreza, la lucha contra el terrorismo y el separatismo.

Según CCTV, los exportadores de algodón de Xinjiang han perdido cientos de millones de yuanes (decenas de millones de euros) a raíz de la veda occidental. El cese de las compras de algodón e hilo también está perjudicando a los agricultores: algunos han perdido sus ingresos anuales, que rondan los 100.000 yuanes (13 mil euros) por productor. Los datos confirman lo que el Ministerio de Asuntos Exteriores chino ya había anticipado: las restricciones estadounidenses, especialmente la prohibición de importar algodón, están perjudicando la economía de Xinjiang.

Beijing está bajo presión. Washington y sus aliados parecen cada vez más decididos a coordinar sus acciones contra China. El gobierno chino ha respondido a las recientes sanciones occidentales sobre Xinjiang con contramedidas punitivas. Acto seguido, los internautas chinos, los medios de comunicación estatales y las celebridades chinas lanzaron una campaña contra los gigantes de la confección europeos y estadounidenses que se niegan a comprar algodón de Xinjiang.

La campaña comenzó el 24 de marzo con una publicación en Weibo (una conocida red social china), realizada por la Liga de la Juventud Comunista. En el post, atacaron a marcas famosas como Nike, H&M, Adidas, New Balance, Burberry y Puma. Sin embargo, el boicot no tuvo mucho éxito. A pesar del apoyo inicial, varios sitios chinos de comercio en línea siguieron vendiendo los productos de las empresas en cuestión.

De hecho, una oferta de Nike en Tmall -un modelo de zapatillas de mujer- se agotó al instante, acumulando 350.000 ventas. Tmall es una plataforma de e-commerce propiedad de Alibaba, el gran grupo fundado por el multimillonario Jack Ma, quien libra una disputa con Xi Jinping desde hace tiempo.

La sociedad china en su conjunto no se rige por el nacionalismo, y una señal de ello es que la Federación de Fútbol de Beijing no se sumó a la campaña de boicot contra las marcas extranjeras. Como tantos seleccionados, el equipo chino ha firmado un contrato con Nike por varios años.