Seúl, líderes religiosos al Parlamento: Abolir la pena de muerte

Guiados por el presidente de la Comisión episcopal Justicia y Paz, los representantes de las mayores religiones nacionales han presentado una petición a la Asamblea nacional para sostener el borrador que hará que sea ilegal la pena capital. El obispo de Daejeon a AsiaNews: “También los criminales son hijos de Dios y la vida depende de Él. Debemos reparar los fundamentos de nuestra sociedad”.

Seúl (AsiaNews)- Los líderes de las mayores religiones de Corea del Sur, han presentado en el Parlamento una petición para sostener el borrador de ley de dos partidos políticos que quiere abolir la pena de muerte. Guiados por el presidente de la Comisión episcopal Justicia y Paz, mons. Lazzaro You Heung-sik, se han encontrado con diputados para pedir a ellos de “llevar al hombre al centro de la sociedad, también en casos de errores y de crímenes cometidos”.

El grupo reunió a diputados y periodistas el día de la presentación del borrador, el pasado 6 de julio. A AsiaNews, mons You narra: “sobre 2999 diputados de la Asamblea nacional, 172 han firmado esta petición. Los exponentes de las religiones se unieron para esta batalla porque estamos de acuerdo sobre el hecho que la vida no está en manos de los hombres”. Junto a él estaban un líder protestante y dos bonzos, uno del budismo tradicional y otro de la orden Won, muy seguido en el país.

Desde el 2010, explica aún el prelado, “en Corea del Sur tenemos una moratoria a las ejecuciones. Pero esto no basta y no puede bastar. Hemos presentado el mismo pedido 4 veces, pero jamás llegó a la Asamblea nacional. Ahora, en cambio el aire cambió, un diputado me explicó que el texto debería pasar. La discusión final está prevista para septiembre próximo”.

Desde el punto de vista legal, a obrar fueron los diputados que han presentado al Parlamento una moción de dos partidos que cita la Constitución y la prevista obligación de “respetar la dignidad humana”. La finalidad, explica el democrático Yoo Inh-tae, “es el de transformar al país en una nación que abolió la pena de muerte. Llegó el momento de declararla ilegal, sobre todo considerando que hemos dado a la comunidad internacional al Secretario de las Naciones Unidas, Ban Ki-moon y que somos miembros del Concejo Onu para los derechos humanos”.

Ahora el texto deberá pasar por la Comisión legislativa y judicial para ser examinado. Inmediatamente después, llegará a la Asamblea nacional para el voto plenario y sólo entonces podrá terminar en manos del gobierno para ser transformado en ley. En diciembre de 2014, cuando en el Palacio de Vidrio se votó por la abolición de la pena de muerte en el mundo, Seúl se abstuvo con otras 33 naciones.

La vida de cada ser humano, concluye mons. You: “Depende del Señor. También los criminales son hijos de Dios. Si hay alguien que se equivoca por culpa de una sociedad que no lo ha amado, de la situación social que en un cierto sentido lo ha creado criminal. Debemos reiniciar desde los fundamentos de la sociedad y repararlos, poniendo al hombre al centro para evitar egoísmos y fracasos de todo tipo”.