Señales de un deshielo entre Teherán y Riad

Una delegación iraní se reunirá con el ministro saudí de peregrinaciones para evaluar la reanudación de los viajes de los iraníes a La Meca después del incidente del año pasado, que causó la muerte de más de 2 mil personas, entre ellas 136 iraníes.

Teherán (AsiaNews) - La República Islámica de Irán se prepara para enviar una delegación a Arabia Saudita para organizar la peregrinación a la Meca de este año. La Hajj (peregrinación) es considerada uno de los cinco pilares del islam y cada buen musulmán debe realizarla al menos una vez en la vida. Arabia Saudita ha utilizado en modo político a menudo el permiso para llegar a la Meca. Por ejemplo, desde hace años está prohibido a los sirios viajar a las ciudades santas musulmanas.

La visita iraní es la primera desde que las relaciones diplomáticas entre los dos países del Golfo fueron interrumpidas en enero pasado bruscamente, tras el dramático incidente de la aglomeración ocurrida en la peregrinación del año pasado (v. foto).

Said Ohadi, el presidente Órgano iraní para el Hajj (peregrinación) declaró a la agencia de noticias oficial IRNA que los miembros de la delegación iraní están a la espera "de los visados" para ir a Arabia Saudita, y agregó que la delegación tiene previsto "reunirse con el ministro saudí de Peregrinación".

La agencia de noticias iraní Tasnim informó ayer otra declaración de Ohadi según la cual "el destino de la Hajj se fijará en el curso de esta reunión". AsiaNews no ha podido, sin embargo, obtener un comentario de confirmación o denegación de Arabia.

En septiembre del año pasado una trágica pelea en Mina, cerca de La Meca había causado cientos de víctimas, 2.070 muertos para ser precisos según las estadísticas reportadas por la agencia Reuters. Entonces, este balance había sido rechazada por Arabia Saudita, que ha reconocido oficialmente la muerte de sólo 769 peregrinos. Entre todas las nacionalidades, los iraníes han pagado el precio más alto, 136 muertos, 102 heridos y 344 desaparecidos. Entre estos últimos hay personas prominentes, como el ex embajador iraní en el Líbano.

Irán había acusado inmediatamente a las autoridades saudíes de "mala gestión" y de "incompetencia" hasta llegar a sugerir que el incidente fue premeditado. Durante la peregrinación, de hecho, responsables los saudíes tenían "un camino cerrado, provocando en consecuencia una enorme aglomeración" El incidente llevó a la exasperación de la relación entre los dos países rivales que luchan desde hace décadas, más o menos en silencio por la hegemonía en la región en varios frentes: desde el Líbano a Siria, Irak, Bahrein y Yemen.