Rohingyá, Aung San Suu Kyi: ‘Un enorme iceberg de desinformación’
“Implementado para crear problemas entre las diversas comunidades y promover el interés de los terroristas”. Las primeras declaraciones de la premio Nobel desde el inicio de las últimas violencias. El comunicado emitido después de una llamada telefónica con el presidente turco Erdogan. Los enfrentamientos en Rakhine han causadola muerte de al menos 400 personas. Unos 125 mil Rohingyá han buscado refugio en el vecino Bangladesh. Más de 25.000 residentes no musulmanes fueron evacuados.
Yangon (AsiaNews/Agencias)- La indignación de la comunidad internacional por el tratamiento de Myanmar hacia los Roihngyá es alimentada por “un enorme iceberg de desinformación”. Es cuánto afirma hoy Aung San Suu Kyi, consejera de Estado y líder de facto birmano, que responde a la invitación de la Naciones Unidas a poner fin a las violencias en el norte del país.
La última crisis en el Estado de Rakhine inició el pasado 25 de agosto, cuando los militantes del Arakan Rohingya Salvation Army (Arsa) han atacado decenas de puestos de policía y a una base militar. Los enfrentamientos y una contraofensiva militar han causado la muerte de al menos 400 personas y han desencadenado el éxodo de los habitantes de los pueblos de la región. Unos 125 mil Rohingyá han buscado refugio en el vecino Bangladesh, mientras más de 25 mil residentes no musulmanes fueron evacuados con la asistencia del Estado.
El gobierno de Myanmar afirma que sus fuerzas de seguridad de seguridad están combatiendo una legítima campaña contra los “terroristas bengalíes”, responsables de una serie de ataques contra la policía y el ejército desde octubre pasado. Las autoridades y los grupos étnicos locales acusan a los militantes Rohingyá por los incendios de las casas y los muertos entre los civiles budistas e hindúes.
En las primeras declaraciones oficiales desde el inicio del último conflicto armado, Aun San Suu Kyi afirma que la “desinformación” con los cuales los medios y gobiernos internacionales tratan el caso Rohingyá “es calculada para crear muchos problemas entre las diversas comunidades, con el objetivo de promover el interés de los terroristas”.
La oficina del consejero de Estado emitió un comunicado después de una conversación telefónica entre la “Señora” y el presidente turco Recep Tayyip Erdogan, el cual había sostenido la existencia de un “genocidio” en relación con los Rohingyá. Como ejemplo de la falta de válidas informaciones sobre el argumento, la líder birmana subraya la publicación de algunas imágenes en internet por parte del vice Premier turco, Mehemet Simsek. “Filmadas en otro lado y no en Burma”, las fotografías mostraban diversos cadáveres, atribuidos de modo equivocado a musulmanes Rohingyá”.
Aung San Suu Kyi defiende las acciones de su gobierno, diciendo que su administración “está tutelando a toda la población del Estado de Rakhine en el modo mejor posible”. “Sabemos muy bien -aclara la premio Nobel- qué significa ser privados de los derechos humanos y de la protección democrática. Por esto nos aseguramos que a todas las personas de nuestro país sea asegurada la tutela de los derechos y una defensa no sólo política, sino también social y humanitaria”.
En los últimos días, “la Señora recibió duras críticas de parte de la comunidad internacional y de los países islámicos por su silencio frente al aumento de la crisis humanitaria. Malala Yousafzai, la más joven ganadora de un premio Nobel de la paz, lanzó ayer un pedido para que termine la “persecución” a los Rohingyá, invitando a Aung San Suu Kyi a condenar le violencias.
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