Rajshahi: fue asesinado un tribal católico. Quizás por una venganza por terrenos

de Sumon Corraya

El hombre se llamaba Louis Soren y tenía cuarenta años. Los agresores intentaron borrar toda huella del homicidio quemando el cuerpo. La mujer lo reconoció por un signo en su pierna. Sacerdote del PIME: “Hemos sepultado a Louis en el cementerio local”.

Naogaon (AsiaNews)- Louis Soren, un católico miembro de una tribu de cuarenta años de edad, fue asesinado en el pueblo de Jabripara, en el distrito de Naogaon en Bangladesh. La policía encontró el cuerpo semi carbonizado el 9 de enero pasado. El rostro del hombre estaba totalmente desfigurado e irreconocible. La esposa, Gugita, logró identificarlo sólo a raíz de una marca que él tenía en una de sus piernas. La mujer realizó una denuncia contra desconocidos, pero la policía aún no ha identificado a ningún culpable.

Louis Soren pertenecía a la parroquia de Bhutahara, donde frecuentaba la iglesia de Niamotpur, que pertenece a la diócesis de Rajshahi. La parroquia está formada por 2,578 miembros, todos ellos miembros de tribus indigentes. De las primeras reconstrucciones surgió que el 8 de enero el hombre había ido a trabajar con la mujer a sus campos de trigo. Gugita, que había vuelto a su casa antes, lanzó la alarma después de algunas horas, preocupada porque el marido no había regresado. “Lo buscamos durante toda la noche- refirió- pero no logramos encontrarlo. Reciénmás tarde, encontramos su cadáver en un pueblo vecino. Quiero que se haga justicia por el homicidio de mi marido”.

Las autoridades tuvieron dificultades para identificar al hombre católico. Obaidul, jefe de la policía local, declaró: “Al principio no lo reconocíamos, pues el rostro estaba desfigurado. Los asesinos intentaron eliminar cualquier prueba”.

El Padre Emilio Spinelli, sacerdote misionero del PIME (Pontificio Instituto de Misiones extranjeras) que trabaja en la diócesis de Rajshahi, confirma a AsiaNews la muerte de Louis. Asimismo, agrega: “No sabemos quién está involucrado en este homicidio. La policía nos entregó su cuerpo sin vida. Lo hemos sepultado en el cementerio de la iglesia local”.

De hace años la minoría cristiana en Bangladesh sufre ataques y violencia. La mayor parte de estos se deben a conflictos económicos, en particular la expropiación forzada de tierras por parte de los radicales islámicos.