Protesta de 500 días por los hijos desaparecidos: los cristianos se unen a las madres tamil
Dos manifestaciones reencienden la atención sobre el drama de tantos hijos y maridos desaparecidos durante la guerra civil. Consignaron una petición que pide también la liberación de los detenidos. La protesta silenciosa sirve para “demostrar el amor y la preocupación de las madres tamil que piden verdad y justicia”.
Colombo (AsiaNews)- Protestan en modo pacífico en las calles desde hace 500 días y piden sólo una cosa: que el gobierno de Sri Lanka les diga qué fin han tenido sus hijos y parientes desaparecidos. Son decenas de madres tamil, que desde hace años esperan conocer la suerte de sus parientes de los cuales no se tienen más noticias desde que terminó la guerra civil. A su protesta, la semana pasada se unieron también diversos líderes católicos y cristianos. Todos juntos han dado vida a dos sit-in y al final de la manifestación han presentado a las autoridades una petición oficial.
El primer evento se realizó el 12 y 13 de julio y contó con la participación de numerosos activistas en apoyo de las madres que ocupan un espacio del Vihara Maha Devi Park. Las mujeres manifiestan en representación de otras madres desesperadas que residen en los distritos occidentales de Vavuniya, Mullaithivu, Kilinochchi y Trincomalee. A AsiaNews Sampath Samarakoon, uno de los organizadores, afirma: “Dimos vida a esta protesta silenciosa para demostrar el amor y la preocupación de aquellas madres tamil que piden verdad y justicia”.
El p. Rohan Silva, ex superior provincial de los Oblatos de María Inmaculada, agrega: “Formamos parte de la misma familia cristiana. No tiene importancia cuál sea su etnia, religión o lengua. Sentimos un gran dolor y frustración por estas familias tamil. Queremos que el gobierno haga justicia los antes posible”. Sor Deepa Fernando de la Holy Family, subraya: “También las personas que viven en el sur deben tener compasión por la infeliz situación (de aquellos que viven en el norte) y esperan saber la suerte de sus queridos. Estas desapariciones no pueden ser comparadas con ninguna otra condición. Si alguno muere, sabemos que aquella persona no está más en este mundo. Pero si alguno desaparece, nada puede consolarte”.
Al terminar el evento, activistas y católicos han entregado un documento al gobierno de Colombo, a las oficinas de varias autoridades, a las representaciones militares, a la misión de la Onu y a las misiones diplomáticas con sede en la capital, por un total de 241 individuos y 39 organizaciones. En el texto se pide la publicación de una lista de sobrevivientes de la lucha con las fuerzas armadas en las fases finales de la guerra y la liberación de todos los detenidos.
El segundo sit-in se realizó el 16 y el 16 de julio en Kilinochchi, Vavuniya y Mullaithivu. Los participantes han reafirmado que “no se trata de simples desapariciones, sino de desapariciones forzadas, porque sabemos bien dónde, cómo y por manos de qui´n desaparecieron nuestros hijos y maridos”. “¿Cómo puede el gobierno afirmar que no sabe nada”?, lamentan. Sor Rasika Peiris declara: “La teología de la reencarnación implica una ‘teología de la práctica’ con la cual intentamos construir el Reino de Dios trabajando con y para el otro, que son los pobres de los más pobres de la sociedad. Siendo una religiosa que trabaja en favor de las personas afligidas por la guerra ya sea en forma teórica como práctica, considero que (estas madres) estén entre los más pobres entre los pobres, explotadas por estructuras opresivas. Ellas quieren encontrar un nuevo modelo de vida, mientras luchan por la plena liberación y la auto-determinación”.
17/08/2019 10:53
24/10/2017 14:35