29/11/2019, 13.11
VATICANO
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Papa: miremos la muerte como el momento en que el Señor viene a tomarnos

“El Señor nos dice que estemos preparados para el encuentro, la muerte es un encuentro: es Él quien viene a encontrarnos, es Él quien viene a tomarnos de la mano y a llevarnos con Él. ¡No quisiera que esta simple prédica fuese un aviso fúnebre! Es simplemente el Evangelio”.

Ciudad del Vaticano (AsiaNews) –  Mirar la muerte como el momento en el que el Señor viene a tomarnos, y prepararse para ese momento. De ello habló hoy el Papa Francisco, en la homilía de la misa celebrada esta mañana en la Casa Santa Marta, al comentar el pasaje del Evangelio (Lucas 21, 29-33) en el cual Lucas repite las palabras de Jesús: “El cielo y la tierra pasarán, pero mis palabras no pasarán”.  

Y así, dijo Francisco, “todo acabará”, pero “Él permanecerá”, y esto nos invita a reflexionar sobre el momento del fin, es decir, sobre la muerte. Ninguno de nosotros sabe exactamente cuándo sucederá, es más, habitualmente tendemos a postergar este pensamiento, creyéndonos eternos, pero no es así. “Todos tenemos esta debilidad vital, esta vulnerabilidad. Ayer estaba meditando sobre esto, en un hermoso artículo que ha salido en la Civiltà Cattolica y que nos dice que lo que todos tenemos en común es la vulnerabilidad: somos iguales en la vulnerabilidad. Todos somos vulnerables y en algún momento esta vulnerabilidad nos conduce a la muerte. Por eso vamos al médico, para ver cómo anda mi vulnerabilidad física, otros van al psicólogo para curar alguna vulnerabilidad psíquica”.

Por lo tanto, la vulnerabilidad nos une y no hay ilusión que nos ponga a salvo de ella. En mi tierra, recordó el Papa, estaba de moda pagar el funeral por adelantado, con la ilusión de salvar del gasto a la familia.  Salió a la luz el fraude provocado por algunas empresas funerarias, y la moda pasó. "Cuántas veces nos engaña la ilusión"– comentó el Papa -, “como la de ser eterno”. La certeza de la muerte está escrita en la Biblia y en el Evangelio, pero el Señor siempre nos la presenta como un "encuentro con Él" y la acompaña con la palabra "esperanza". 

“El Señor nos dice que estemos preparados para el encuentro, la muerte es un encuentro: es Él quien viene a encontrarnos, es Él quien viene a tomarnos de la mano y llevarnos con él. ¡No quisiera que este simple sermón sea un aviso fúnebre! Es simplemente el Evangelio, es simplemente la vida, es simplemente decirse unos a otros: todos somos vulnerables y todos tenemos una puerta a la que el Señor llamará algún día”. Por lo tanto, es necesario prepararse bien para el momento en que sonará el timbre, el momento en que el Señor llamará a nuestra puerta: recemos unos por otros, es la invitación que el Papa hace a los fieles presentes en la Misa, para estar listos, para abrir la puerta con confianza al Señor que viene.

“De todas las cosas que hemos reunido, que hemos ahorrado, que son buenas por ley, no nos llevaremos nada ... Pero sí nos llevaremos el abrazo del Señor. Piensa en tu propia muerte: ¿cuándo moriré? En el calendario no está arreglado, pero el Señor lo sabe. Y orar al Señor: ‘Señor, prepara mi corazón para morir bien, para morir en paz, para morir con esperanza’. Esta es la palabra que siempre debe acompañar nuestra vida, la esperanza de vivir con el Señor aquí, y luego, vivir con el Señor en otra parte. Recemos unos por otros, por esto”.

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