Pakistán recuerda al mártir Shahbaz Bhatti. Hermano Paul: Derrotó a la ideología del mal

de Jibran Khan

En todo el país se llevaron a cabo misas y celebraciones por el ministro católico, asesinado hace cinco años por los fundamentalistas islámicos. Recogido la primera evidencia de la apertura del proceso diocesano. De los líderes islámicos las primeras aberturas para la revisión de las leyes sobre la blasfemia. A AsiaNews el recuerdo personal del hermano Paul.

Islamabad (AsiaNews) - "La memoria de Shahbaz Bhatti, su trabajo por los pobres, los débiles, y el servicio en el país aún son más grandes, particularmente entre los jóvenes, incluidos los que ni siquiera lo han conocido. Esto, después de algún tiempo, es tal vez el mayor legado de mi hermano no sólo para los cristianos, sino para todos en Pakistán". Es cuanto afirma, Paul Bhatti ex Ministro Federal para la Armonía Nacional y líder de la All Pakistan Minorities Alliance (Apma), al comentar el quinto aniversario de la muerte de Shahbaz. En estos días las iglesias en Pakistán están celebrando misas, vigilias de oración y funciones especiales para honrar la memoria del político católico, masacrados por extremistas islámicos por haber luchado a favor de las minorías y promovido cambios en las leyes sobre la blasfemia para frenar los abusos.

Shahbaz Bhatti, ministro católico para las minorías religiosas, fue asesinado en la mañana del 2 de Marzo de 2011 en su camino al trabajo, su cuerpo acribillado por treinta balas. Dos meses antes había sido asesinado el gobernador de Punjab Salman Taseer que, junto con Bhatti, se pusieron en primera persona para salvar la vida de Asia Bibi, una madre cristiana de cinco hijos condenada a muerte - incluso si es inocente - por blasfemia.

En estos días la Iglesia de Pakistán, coincidiendo con el quinto aniversario de la muerte, comenzaron a recoger testimonios para la apertura del proceso diocesano que dará lugar a la declaración de "mártir" de Bhatti. Están involucrados en la iniciativa los diferentes obispos paquistaníes, entre ellos Mons. Joseph Coutts - hoy en Karachi y presidente de la Conferencia Episcopal - entonces obispo de Faisalabad diócesis de origen del político católico.

En retrospectiva, se mantienen vivos en la memoria de los católicos paquistaníes las palabras de Shahbaz Bhatti en un video-mensaje grabado una semana antes de su muerte, en una mañana de fría primavera: "Estoy dispuesto a morir por la causa - dijo Shahbaz - como siempre he vivido por mi comunidad ... por la que estoy dispuesto a morir para defender sus derechos. Estoy listo para morir por mis ideales".

Recordando la labor de su hermano, Paul Bhatti - que durante un cierto período de tiempo ha heredado la política activa - señala que él y su sacrificio ha sido capaz de "derrotar la ideología del mal, dando esperanza al país, asegurando el respeto a los más débiles". Después de haberse reunido con varios obispos de Pakistán, Paul Bhatti dice que "hay una convicción muy fuerte para que Shahbaz sea declarado mártir.

La mejor manera de honrar su memoria - añade - está dando lugar a la causa de beatificación. Especialmente para nuestros jóvenes cristianos que ven, en su ejemplo, lo que significa tener fe, el honor, la fe en la vida práctica, amar a la gente, incluso aquellos que no comparten su misma fe, llevar la paz".

Paul Bhatti dice que atestigua la estima los mensajes recibidos en los últimos días de los políticos paquistaníes (una carta personal de Bilawal Bhutto), prelados del Vaticano, entre ellos el cardenal Jean-Louis Tauran, que tenía un vínculo especial con Shahbaz, así como de líderes religiosos y estudiosos musulmanes. "Todos me dijeron - dice - que la memoria de mi hermano sigue viva y su posición actual, su sacrificio no fue en vano y el país, aunque lentamente, está cambiando. Se necesitará tiempo para derrotar la ideología radical, pero los primeros pasos se están haciendo con gran determinación, tanto en el gobierno, como entre los militares y dentro de los partidos".

En la confirmación de estos pequeños signos de cambio la firma de la declaración del Presidente del Consejo de Ideología Islámica, Mohammad Maualana Sherani. Al comentar sobre la enorme multitud que asistió al funeral de Mumtaz Qadri, el asesino de Taseer, dijo que, si bien "respetando los sentimientos" de las personas es aún más importante, "la supremacía de la Constitución y la ley, que nadie puede violar". Recientemente, el mismo líder religioso musulmán ha lanzado una propuesta para una conferencia para discutir las leyes de blasfemia - hasta ahora un tabú en el país - y para evaluar cualquier modificación para evitar abusos.

En este momento, la diócesis de Islamabad / Rawalpindi ha afirmado con "orgullo" la posibilidad de llamar "hijo de nuestra tierra" Shahbaz y su renuncia a los bienes e intereses personales, para dar su vida a la causa para el bien de los cristianos, las minorías, el país. El P. Arif Bhatti, un cura en Khushpur, asegura que su sacrificio "no será en vano". A pesar del vacío dejado, especialmente entre los miembros de la familia, sigue siendo enorme: "De mi hermano - concluye Paul Bhatti - Echo de menos el amor, la sonrisa, la fuerza ... era para todos nosotros apoyo y una fuente de refugio".