Pakistán, el 8 de octubre es la última audiencia para Asia Bibi
La madre cristiana está presa hace nueve años, y se encuentra bajo régimen de aislamiento en la cárcel de Multan. Su marido afirma que ella “se dispone a morir por Cristo. Jamás se convertirá al islam”. El país se encuentra “paralizado” por grupos de fanáticos, que no quieren que la ley sobre blasfemia sea abolida.
Multan (AsiaNews) – La última esperanza de salvar a Asia Bibi, la madre cristiana condenada a muerte por blasfemia y encerrada hace nueve años bajo régimen de aislamiento en la cárcel de Multan, en el Punjab pakistaní, será el 8 de octubre, cuando se lleve a cabo la última audiencia de su causa, en la Corte Suprema. Es lo que hacen saber sus familiares, que el 4 de octubre pasado participaron en un evento en Lancaster, organizado por la asociación “Ayuda a la Iglesia que sufre”. El marido de la mujer, Ashiq Masih, al ser entrevistado por el presidente de la British Pakistani Christian Association (BPCA), declaró: “Asia es psicológica, física y espiritualmente fuerte. Está lista y dispuesta a morir por Cristo, dada su enorme fe. Jamás se convertirá al islam”.
En Pakistán el caso de la mujer cristiana constituye un tema sensible. Asia Bibi fue arrestada en junio de 2009 tras ser acusada por sus colegas de haber ultrajado al profeta Mahoma, pero en realidad, su única “culpa” fue beber del mismo recipiente utilizado por otras mujeres musulmanas. En noviembre de 2010 fue condenada a muerte en la horca y desde entonces se encuentra bajo régimen de aislamiento en la prisión de Multan, donde sólo se le concede una hora de aire por mes, fuera de su celda. Durante todos estos años, se enfermó varias veces, y algunas de sus carceleras, que ya han entablado un estrecho vínculo con ella, hacen saber que no recibe atención médica adecuada.
Wilson Chowdhry, presidente de la BPCA, informa que “a su familia sólo le permiten visitarla muy rara vez. Los periódicos y los canales de televisión informan que Asia Bibi está bien y que recibe un buen trato. En realidad, sabemos, por las guardias, que ha comenzado a manifestar síntomas de demencia y pérdida de la memoria”. “Esperamos que sea liberada – agrega - y que se le brinde todo el apoyo psicológico y el tratamiento que necesite”.
El caso de la madre cristiana ha polarizado a la sociedad y ha conducido a nuevos episodios de violencia, no sólo contra los cristianos, sino también hacia los musulmanes que se expresaron a favor de la mujer. El hecho que causó mayor estruendo fue el homicidio de Salman Taseer, gobernador de Punjab, muerto en 2011 por manos de su guardaespaldas, por haber criticado la ley sobre blasfemia y ofrecerse a presentar un pedido de gracia para Asia frente al presidente del Pakistán.
En todos estos años el proceso fue aplazado en retiteradas oportunidades aludiendo motivos de seguridad y porque uno de los magistrados se retiró del caso. El próximo lunes 8 de octubre, la audiencia estará presidida por el presidente de Tribunal supremo, Mian Saqib Nisar, quien estará acompañado de los jueces Asif Saeed Khosa y Mazhar Alam Khan Miankhel.
El Card. Joseph Coutts, recientemente entrevistado por AsiaNews, comentó el caso y declaró que el país se encuentra en una especie de “punto muerto”. “El gobierno no es lo suficientemente fuerte como para cambiar la ley sobre blasfemia – sostiene -. Cualquier intento de modificar [la ley] debe necesariamente pasar por el Parlamento, donde chocará con un creciente número de grupos extremistas. Estos grupos utilizan la violencia y el terrorismo para llevar adelante su agenda, son partidarios de un islam fanático y obtuso, y han politizado la sociedad contra cualquiera que exprese opiniones diferentes”.