Nuncio en Damasco: Yarmouk, vergüenza consumada en el silencio de la comunidad internacional
Damasco (AsiaNews)- “Es una vergüenza que se despierten sólo ahora, que se hable sólo ahora que el Estado islámico (EI) entró en la zona, cuando desde hace tiempo la gente vive con hambre y en medio a dificultades. Era una tragedia bajo los ojos de todos”. Sin medios términos, el nuncio apostólico en Siria, mons. Mario Zenari, cuenta a AsiaNews los hechos que se están consumando en estos días en el campo prófugos palestino de Yarmouk, en la periferia de Damasco. Diversas agencias internacionales han lanzado la alarma de una realidad al borde del colapso o de la catástrofe. Para un funcionario de las Naciones Unidas activo, la situación “va más allá de lo inhumano”. Para el Unicef, agencia Onu dedicada a la infancia, dice “Yamouk es una nueva Srebrenica”, de hace 2 años bajo el asedio y sin agua, ni comida o remedios, con “al menos 3.500 niños encerrados y reducidos al hambre y a la sed”.
De hace días, al menos del 1° de abril, el EI ocupó parte del campo (según algunas fuentes hasta el 80”%), que se convirtió en un campo de guerra contra el ejército sirio. En ayuda a los milicianos jihadistas intervino también el frente de Al-Nusra, ligado a Al-Qaeda, que a menudo el occidente define como “una oposición siria moderada”. Al mismo tiempo, milicianos ´palestinos opuestos a Damasco y combatientes del Free Syrian Army combaten contra el EI.
Según diversos análisis, la ocupación del campo, a sólo 8 km de la capital es una premisa para el ataque a Damasco. Mientras tanto, los prófugos son usados como escudos humanos contra los bombardeos del ejército sirio. Por los testimonios fragmentarios que llegan del campo serían miles los muertos, cantidad de cabezas cortadas y clavadas en postes y verjas. También el imán de la mezquita, cercano a Hamas, habría sido decapitado con la acusación de apostasía.
Los islamistas han ocupado diversos edificios y muchas oficinas presentes en el interior del campo de prófugos palestino. Testigos agregan además que muchos de los combatientes del EI estarían con la población local y no milicianos provenientes del exterior, los cuales han jurado alianza y fidelidad al movimiento jihadista.
Interpelado por AsiaNews, el nuncio apostólico en Damasco habla de “facciones en lucha entre ellos” y “quienes pagan las consecuencias son estos pobres civiles”. “Siento elevarse en vuelo aviones y cazabombarderos”, agrega. Las autoridades de damasco “están estudiando la situación”. Ciertamente es que esta gente no puede ser dejada como rehén”. Mons. Zenari subraya que “desde hace tiempo” la situación en la zona es “gravísima”, también si ninguno hablaba. La Onu describe una realidad que va más allá de los inhumano, no hay términos adecuados para describir la situación de esta gente”
“Da realmente impresión-prosigue el nuncio apostólico- el silencio que cayó en el tiempo sobre estos palestinos, el grupo más castigado del país”. Evacuados que “desde hace decenios vagan de una parte a la otra”, son ellos “los que sufren más en una realidad ya de por sí dramática. En siria, el Isis, al-Nusra y las facciones armadas palestinas juegan sobre la cabeza de esta pobre gente, de los niños….¡Impresionante!”.
Hablando de Yarmouk, mons. Zenari cuenta de un campo “al cual no se podía entrar, si bien siempre yo me informaba de la situación, para saber si era posible hacer algo. Sin embargo, las posibilidades de movimiento eran siempre muy reducidas. Por ejemplo, en ocasión de Navidad de 2013, recibí una suma de dinero de escuelas cristianas palestinas, destinados para estos sus hermanos sufrientes. Me ocupé mucho para hacer llegar las ayudas, pero no fue fácil. Ya en el pasado era muy arriesgado aventurarse en el mismo campo, ahora la zona es off-limits”.
Lo que agrava la situación es la falta de remedios, de nafta para la calefacción, en un año que se demostró como un invierno “particularmente rígido, con la nieve que cayó también en Damasco”, continúa el nuncio. También antes la comida “entraba con cuenta gotas”. “La comunidad internacional- acusa- se despertó con un enorme retraso frente a una tragedia que se consumaba ene l silencio y en la indiferencia”. Mientras tanto, hay otras áreas muy críticas en el país, entre las cuales Alepo, donde “en el barrio cristiano cayeron varios ataques de mortero” y la misma Homs, cuenta el diplomático vaticano, “donde fui hace pocos días para conmemorar el primer aniversario de la muerte del p. Frans [ Van del Lugt, ndr)”. “La situación es crítica no sólo en Siria-concluye mons. Zinari- pero en toda la región, basta pensar en lo que está sucediendo en Irak, en Yemen.. y todo el Medio oriente que está en llamas” (DS).
11/11/2014
15/03/2017 14:31