Murió Shimon Peres, un hombre de guerra y de paz

de Joshua Lapide

Tenía 93 años. En su juventud fue un "halcón". Fue el responsable de los suministros de armas a Israel desde la URSS, Francia, Estados Unidos. Fue el primer defensor de los asentamientos israelíes en los territorios ocupados. Primer ministro dos veces, durante siete años presidente. Con Rabin y Arafat ganó el Premio Nobel de la Paz en 1994. Ha participado como "paloma" de la reunión de oración por la paz en el Vaticano en 2014. Gideon Levy: Peres es un hombre del "casi".

Tel Aviv (AsiaNews) - Shimon Peres, dos veces primer ministro y una vez presidente de Israel, murió ayer por la noche a las 3 (hora local) a la edad de 93 años. Esto fue anunciado por su hijo Chemi calificándolo como "uno de los padres fundadores del Estado de Israel", que "trabajó sin descanso" para eso.

Hace dos semanas, Peres había sido hospitalizado por una hemorragia cerebral y permaneció en coma hasta ayer, cuando su condición empeoró.

Peres es considerado por muchos un hombre de paz en el mundo, pero también un hombre de guerra. Un diputado árabe-israelí, Basilea Ghattas, de la Lista Árabe Unida, hablando de él en Facebook, dijo Peres "está cubierta de sangre" palestina "de pies a cabeza". Se las arregló, agrega Ghattas en su perfil de Facebook, "para hacerse pasar como una paloma de la paz hasta obtener el Premio Nobel". De hecho, él "es directamente responsable de delitos y crímenes de guerra hacia nosotros", "uno de los pilares más antiguos, el más criticable, cruel, extremista, el proyecto colonialista sionista".

En el 34 llega a Israel (entonces Palestina bajo mandato británico) y vive en un kibbutz en Galilea donde también formó su conciencia política en el socialismo de las nuevas colononias.

A la proclamación del Estado de Israel en 1948 y el estallido de la guerra con los países árabes, es responsable del ejército clandestino del Haganá. En este periodo, Shimon Peres (que tomó este nombre hebreo, dejando su apellido original, Persky) coopera con los padres de la patria Ben Gurion y Yitzhak Rabin, siendo responsable de la adquisición de armas para el ejército israelí, Tsahal. Gracias a él se puso en marcha contratos para la venta de armas por parte de la URSS, a continuación Francia, y los Estados Unidos. Gracias a la ayuda de Francia nació el programa nuclear militar israelí y la planta nuclear de Dimona, cuya existencia no está admitida públicamente por parte de Israel.

En los primeros años de los 70 Peres es considerado un "halcón". apoya la operación en Entebbe (Uganda) para la liberación de rehenes israelíes en manos de piratas del aire palestinos; aprueba los planes de Goush Emunim, que pone en marcha la primera colonización de los territorios palestinos.

A pesar de una serie de derrotas electorales (en Israel se le llama "el eterno perdedor"), es capaz de ser primer ministro dos veces (1984-86, 1995-96), ha estado durante 50 años en la vida pública en el papel de responsabilidad en la defensa, en los asuntos exteriores, en Finanzas.

El momento más brillante de su carrera fue cuando él y Rabin, pusieron en marcha el diálogo con los palestinos hasta los Acuerdos de Oslo (1993), que establecen la autonomía progresiva para los palestinos hasta la proclamación de un Estado.

Gracias a este compromiso, en 1994, junto con Yasser Arafat y Rabin, fue galardonado con el Premio Nobel de la Paz.

Pero en 1995, Rabin fue asesinado por un judío fundamentalista, mientras que la sociedad israelí comienza a deslizarse hacia posiciones más agresivas y lejanas del Partido del Trabajo.

Con altibajos Peres cambia de partido, para formar una alianza con Ariel Sharon (líderes de invasión del Líbano en 1982), aprobando la retirada de Gaza y llegando a la presidencia en 2007. A los 84 años, es una figura respetada, una "paloma", con los aspectos pragmáticos, incapaz de frenar la deriva de las negociaciones entre israelíes y palestinos.

Él dejó la presidencia en 2014 y el mismo año ha querido asistir a la ceremonia de paz en el Vaticano, junto al papa Francisco, Mahmoud Abbas, el patriarca ecuménico de Constantinopla.

Gideon Levy, columnista de Haaretz, lo describió como un hombre del "casi": una "paloma", pero incapaz de ir en contra de la mayoría guerrera; "Casi" un héroe nacional; "Casi" un hombre de Estado memorable.

Y esto, mientras que el diálogo y la paz con los palestinos, que ha promovido hasta su muerte, sigue siendo un sueño lejano.