Kuala Lumpur rechaza a los atletas israelíes. Tel Aviv versus Mahathir, ‘el antisemita’
Los deportistas fueron eliminados del Campeonato mundial de natación paraolímpica, programado para el próximo mes de julio. Malasia, una nación mayoritariamente islámica, no mantiene relaciones diplomáticas con Israel. Kuala Lumpur: “Luchamos en nombre los palestinos oprimidos”.
Tel Aviv (AsiaNews/Agencias) – Israel condena la restricción impuesta por Malasia, que ha vedado la participación de atletas israelíes en los eventos deportivos internacionales que el país del sudeste asiático habrá de hospedar próximamente. Según Tel Aviv, la decisión se ha visto inspirada por el “furioso antisemitismo” del primer ministro malasio, el nonagenario Mahathir Mohamad.
Malasia, una nación mayoritariamente islámica –cerca del 60% de la población es musulmán- , no mantiene relaciones diplomáticas con Israel. Kuala Lumpur anunció la medida hace dos días, tras haber negado la visa a los atletas israelíes que se disponían a participar en el Mundial de natación paraolímpica, a realizarse próximamente en el Estado de Serawak, del 29 de julio al 4 de agosto.
En el día de ayer, el vocero del Ministerio de Relaciones Exteriores israelí, Emmanuel Nashhon, invitó a los organizadores del Comité Paraolímpico Internacional (IPC) a cambiar de sede para el evento, en caso de no lograr convencer a Malasia de revocar la prohibición. “Es vergonzoso –se lee en el comunicado- y contradice totalmente el espíritu olímpico. Israel condena la decisión, que ha sido inspirada, sin duda, por el furioso antisemitismo del primer ministro malasio Mahathir”.
Mahathir, el premier más longevo del mundo, es acusado de antisemitismo desde hace varios años, debido a sus ataques contra los judíos. En una entrevista concedida a la BBC en el mes de octubre, él los definió “narigones”, inculpándolos por los problemas que rigen en el Oriente Medio. El ministro de Relaciones Exteriores malasio, Saifuddin Abdullah, quien anunció la veda, afirma que Malasia continuará asumiendo posiciones fuertes en relación a la difícil situación que atraviesan los palestinos, considerada por Kuala Lumpur como una crisis humanitaria. “Estamos analizando la cuestión palestina, no solamente desde un punto de vista religioso- afirma Saiffudin-; es una cuestión humanitaria y de derechos humanos. Se trata de combatir en nombre de los oprimidos”.