Intelectuales y activistas iraníes promueven un referéndum contra la teocracia

Después del presidente Rouhani, al menos 15 personalidades en el país y en el extranjero piden una consultación para definir el futuro de la República. Duro ataque a la dirigencia, que bloqueó el país y negó la libertad a los ciudadanos. Superar “en modo pacífico” el régimen islámico para instaurar un “sistema parlamentario sobre bases democráticas”.

Teherán (AsiaNews)- Intelectuales, activistas, académicos y personalidades de la sociedad civil han firmado en estos días un documento en el cual se acusa al régimen teocrático de haber fracasado la realización de los ideas republicanas. Aceptando la propuesta lanzada en los días pasados por el presidente moderado Hassan Rouhani, lo 15 que firmaron piden además llamar a un referéndum bajo la supervisión de la comunidad internacional para “definir las características” del futuro Estado.

Según los que proponen, la pregunta del referéndum debería permitir a la población de expresar sobre el establishment al poder y en particular, la dirigencia religiosa que detiene el poder último en el país. Se trata de establecer si esa encuentra todavía “el apoyo de la mayoría”.

Entre los que firmaron la propuesta, subscripta por personalidades que viven en Irán y en el extranjero, está el abogado y Nobel por la paz, Shirin Ebadi, el activista pro derechos humanos (hoy encarcelado) Narges Mohammadi, el jurista Nasrin Sotoudeh. A éstos se agregan también dos rostros del espectáculo: los cineastas Mohsen Makhmalbaf y Jafar Panahi.

En la carta los activistas recuerdan que “transcurrieron 4 decenios desde el nacimiento de la República islámica, un gobierno cuya obsesión por la islamización dejó muy poco espacio a los ideales republicanos”. De aquí las feroces críticas a una magistratura controlada por el ala conservadora, que obra en modo independiente respecto al gobierno (moderado, con tímidos intentos de reformas) guiado por Rouhani.

“El poder judicial-prosiguen los 15 intelectuales- está reducida a un simple ejecutor de las voluntades políticas de cuantos detienen las redes del comando. De este modo muchísimas mujeres, abogados, periodistas, docentes, estudiantes, activistas sociales y políticos fueron maltratados, arrestados, acusados de crímenes gravísimos y encarcelados, por el solo motivo de haber criticado a personalidades oficiales, por haber expresado su propia opinión, invitado a la clase dirigente a respetar la división entre religión y gobierno o haber pedido la cancelación del velo obligatorio para las mujeres”.

Acusando contra un “régimen opresor e irreparable”, los promotores denuncian un “estancamiento político” que ha minado las posibilidades de reformas y cambios, negando de hecho “la libertad a los iraníes”. De aquí la idea de llamar a un referéndum, que representa la máxima expresión de auto-determinación concedida a un pueblo.

“Para superar la crisis-concluye la carta- es necesario archivar al actual régimen islámico en modo pacífico. (La nación) debe moverse en dirección de un sistema parlamentario sobre bases democráticas, que garantice la libertad de expresión y ponga la palabra fin a las discriminaciones contra las mujeres, sancionando el principio de igualdad” entre sexos, entre religiones y etnias diversas.

En los días pasados también el presidente iraní Hassan Rouhani había propuesto, sin entrar en detalle, de llamar a un referéndum. Un intento de sanar las divisiones políticas en el país y la profunda separación entre la dirigencia religiosa con el poder y la mayoría de la población, sobre todo los jóvenes que se demuestran siempre más intolerantes a los dictámenes de los ayatollah.

Por el resto para Irán este primer período de 2018 se reveló más bien turbulento, con manifestaciones de plaza en el cual han perdido la vida al menos 25 personas. Desde hace días, el presidente iraní presiona a los conservadores para que las protestas y el malestar en el país sean un motor de cambio; él no especificó las proposiciones del referéndum, pero es probable una referencia al debate sobre las libertades sociales, acceso de las protestas de las mujeres iraníes contra el velo obligatorio.