Hong Kong, los manifestantes desafían las prohibiciones: enfrentamientos con la policía

Para la ex-colonia, el 13ero fin de semana consecutivo de violentos desórdenes. Temores de una intervención: una fuerza paramilitar se está desplazando hacia Shenzhen. Hoy recurre el quinto aniversario del rechazo de Beijing al pedido de sufragio universal en la ciudad, que en 2014 creó el “Movimiento de los paraguas”.

Hong Kong (AsiaNews/Agencias) – Gases lacrimógenos e hidrantes contra la multitud de manifestantes, que después de lanzar ladrillos y bombas molotov lograron forzar las barricadas de la policía alrededor del Consejo legislativo (LEGCO): Hong Kong vive su 13ero fin de semana consecutivo de violentos desórdenes, después que decenas de miles de personas salieron a las calles, desafiando las prohibiciones de la policía.

Esta mañana un encuentro cristiano en Wan Chai se transformó en una marcha ilegal cuando las personas han comenzado a confluir hacia Chater Garden, llevando a las autoridades a cerrar estructuras recreativas y una estación de la metropolitana. Mientras tanto, aumentan los temores de una intervención de China en el Territorio: medios de Beijing afirman que una fuerza paramilitar se está moviendo hacia Shenzhen, la ciudad continental en la frontera con Hong Kong.

El clima en el territorio continúa tenso: ayer la policía arrestó a conocidos activistas por la democracia y al menos a 3 legisladores, por su presunta involucración en precedentes manifestaciones contra el proyecto de ley sobre la extradición- por ahora suspendido. Los manifestantes antigubernamentales habían convocado para hoy un encuentro y una marcha. Citando los temores por la seguridad pública, la policía negó los permisos y el Civil Human Rights Front se vio obligado a anular los eventos. Pero, ya durante la noche de ayer estaba claro que las prohibiciones no habrían detenido las protestas, mientras que las fuerzas del orden prometían que habrían hecho respetar la ley.

Las autoridades erigieron nuevas barricadas cerca del Liason Office - el departamento que representa al gobierno central de China- y llevado a la calle cañones de agua, en previsión de nuevos enfrentamientos. Al inicio de la tarde, miles de manifestantes se dirigieron hacia la isla de Hong Kong, bloqueando las calles. En el intento de eludir la prohibición a las protestas, la multitud llevaba cruces y cantaba “Alleluia” como en los encuentros religiosos, que no requieren severas autorizaciones. Hoy recurre el quinto aniversario del rechazo de Beijing al pedido de sufragio universal en la ciudad, que en 2014 inició el “Movimiento de los paraguas”. (Occupy Central).