05/07/2019, 14.23
PAKISTAN
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Faisalabad, menor cristiana violada por un político

de Shafique Khokhar

Saima tiene 15 años y trabajaba como doméstica en la casa de Tahir Jameel. Después del enésimo intento de abuso, fue rapada y torturada. El político presionó a la familia para que el padre retirara la denuncia. Pero la joven quiere ir adelante con el proceso. 

 

Faisalabad (AsiaNews) – Una joven doméstica cristiana fue violada y torturada por un político de Faisalabad, en Pakistán. La menor de edad se llama Saima y es la hija de Riaz Masih, un trabajador jornalero. Ella confesó a la familia que fue víctima de la violencia sexual de parte del Tahir Jameel, influyente político local, en cuya casa ella trabajaba desde hacía 6 meses. Los abusos se verificaron en los últimos 2 meses. Después de la denuncia a la policía, el político se reconcilió con la familia. Saima en cambio no quiere se le elimine la pena y pidió al magistrado continuar con las investigaciones.

La cuestión de la joven cristiana salió a la luz en los días pasados, después del enésimo intento de abuso de parte del hombre y de sus hijos. Intentó esconderse en el baño pero fue descubierta, rapada y torturada por la mujer del político. Saima volvió a su casa y les confesó a los padres que por meses sufrió violencias sexuales. 

Los padres fueron a la comisaría en Batala Colony, pero los agentes rechazaron registrar el caso. La denuncia fue depositada sólo el 28 de junio, después que la familia logró atraer la atención pública organizando una protesta frente a la jefatura de la policía.

El político fue incriminado por violación  del Punjab Destitute and Negleted Children Act 2004-34, pero contra él y su familia no fue realizada ninguna acción. Por parte de ellos, los querellantes intentado descargando sus propias culpas acusando a Saima de haber robado joyas y dinero y luego se inventó la historia de la violación cuando fue descubierta.

Después de la registración de la denuncia, la joven fue transferida a una estructura del gobierno protegida reservada a las mujeres, el centro “Dar-ul-Uloom”. El 2 de julio la víctima, su familia y su torturador fueron escuchados por el juez. En este contexto, el padre pidió retirar la denuncia porque había “llegado a un acuerdo de reconciliación” con el político, una figura muy influyente en la zona.

Saima en cambio se opuso, denunció que había sido violada en diversas ocasiones e imploró al magistrado que continuase las investigaciones. Además pidió poder permanecer en la casa protegida, en vez de volver a vivir con su familia.

Naveed Walter, presidente de Human Rights Focus Pakistan, condena el acto de violencia, vilación y amenazas a la joven cristiana y a su familia. Luego subraya que la cuestión de Saima no es un caso aislado, sino que se suma a los casos de diversas jóvenes de las minorías religiosas raptadas, convertidas por la fuerza y obligadas a prostituirse. “Esto ya se volvió una rutina para las menores de edad de las minorías- afirma- este es uno de los motivos  por los cuales nos comprometimos tanto en la campaña de registración de las domésticas en el Departamento de trabajo. Luchamos para que las niñas no sean obligadas a trabajar, ni siquiera acompañando a sus madres en los trabajos”.

 

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