03/12/2018, 15.02
JAPÓN
Enviar a un amigo

En Yokohama, exhiben una antigua pintura cristiana del tiempo de las persecuciones

La obra representa 15 escenas de la vida de Jesucristo y de la Virgen María, entre ellas, la Anunciación y la Pasión. Los personajes llevan trajes y objetos tradicionales del Japón. El cristianismo llegó al territorio en el año 1549. El señor de la guerra  Toyotomi Hideyoshi emitió una orden para expulsar a los cristianos en el año 1587. El shogunato de Tokugawa, durante el período Edo, prohibió la religión en 1612. 

Tokio (AsiaNews/Agencias) –  Expertos del Museo Histórico de Yokohama han efectuado la datación de una rara obra de arte (foto) que representa escenas de culto y oraciones cristianas.  La pintura fue realizada en tinta negra sobre papel tradicional washi, el tradicional rollo chino (22 cm de base y 320 cm de largo) y data de fines del siglo XVI, época en que los cristianos eran víctimas de duras persecuciones.

La obra pertenece a una colección del Sawada Miki Kinenkan de Osio (prefectura de Kanagawa) y está siendo exhibida en Yokohama desde el 23 de noviembre pasado. Describe 15 escenas de la vida de Jesucristo y de la Virgen María, que abarcan la Anunciación y la Pasión; la pieza incluye la transcripción al japonés de oraciones en latín. Las personas representadas en la pintura visten los trajes tradicionales hakama y en la escena de la Resurrección de Cristo, uno de los personajes lleva en la cintura una espada japonesa.

Según los investigadores, el rollo es una reproducción de una pintura religiosa proveniente de Occidente y tuvo una función devocional para los cristianos japoneses. Los caracteres escritos al final de la pintura sugieren que fue realizada por un creyente en el año 1592. Para la datación del washi se utilizó la tecnología del radiocarbono y el instituto de investigación ha descubierto que el papel utilizado se remonta a un período comprendido entre 1556 y 1633.

Osamu Inoue, vicedirector del museo de Yokohama, declara: "Esta es una de las pinturas cristianas más antiguas de Japón”. Yukihiro Ohashi, profesor de Historia del Cristianismo en Japón en la Universidad de Waseda, afirma que la pintura muestra cómo se vivía la religión en aquella época: “Lo más probable es que las celebraciones cristianas se celebraran valiéndose de estas imágenes y usando estas palabras en la oración. El material histórico muestra de manera vívida la atmósfera de aquella época”.

Luego de que el cristianismo fuera introducido en Japón en 1549, el señor de la guerra Toyotomi Hideyoshi emitió una orden para expulsar a los cristianos en 1587. El shogunato Tokugawa, durante el período Edo, prohibió la religión en 1612. El Sawada Miki Kinenkan es célebre por su colección de objetos provenientes de “cristianos ocultos”. El museo descubrió la pintura entre sus obras, pero no sabe explicar su proveniencia.

Con este último hallazgo artístico, prosigue el redescubrimiento de la historia cristiana japonesa. Desde el pasado mes de julio, los lugares del cristianismo “oculto” son patrimonio de la humanidad: la UNESCO ha incorporado a su listado 12 sitios ubicados en Nagasaki y en la región de Amakusa, lugares simbólicos de la persecución perpetrada contra los cristianos durante el período Edo (1603-1867). El 1º de abril, la diócesis de Nagasaki inauguró un museo de historia del cristianismo japonés, en la sede de la antigua residencia episcopal.  

TAGs
Enviar a un amigo
Vista para imprimir
CLOSE X
Ver también
Musulmana, ex radical: Riad y el salafismo (wahabí) un peligro para el islam y para el mundo
17/12/2016 13:14
Papa en Japón: El homenaje a los mártires de Nagasaki y a aquellos de hoy
24/11/2019 10:43
Nagasaki: Del Papa esperamos un nuevo impulso en la difusión del Evangelio
23/11/2019 02:04
La “joven” Iglesia ortodoxa de Moscú y la Pascua. Entre interioridad y apariencia
30/04/2016 13:36
Líderes hindúes nepaleses prohíben a las mujeres ir a la escuela en el período menstrual
29/10/2013


Newsletter

Suscríbase a la newsletter de Asia News o cambie sus preferencias

Regístrese
“L’Asia: ecco il nostro comune compito per il terzo millennio!” - Giovanni Paolo II, da “Alzatevi, andiamo”