Bangladesh, sacerdote hindú decapitado. Temores en la comunidad cristiana (Video)
Gupal Ganguli era sacerdote en el templo hindú de Noldanga. Su cadáver fue encontrado esta mañana y las investigaciones no excluyen se trate de otro homicidio de matriz islámica. Los cristianos del pueblo de Bonpara, donde hace dos días fue asesinado un comerciante católico, viven ahora en total sospecha. Obispo de Rajshahi: “Es inaceptable estar obligados a vivir en el miedo”.
Natore (Asianews)- Esta mañana la policía de Bangladesh encontró el cuerpo sin vida de Gupal Ganguli, el sacerdote hindú del templo de Noldanga, en el distrito de Jhenaidah (en la parte sudoccidental del país). El sacerdote estaba tirado en el suelo con la garganta cortada y la cabeza casi separada del resto del cuerpo. Las investigaciones siguen en curso y los investigadores no excluyen la hipótesis de que se trate de un homicidio de matriz islámica, como el reciente asesinato del comerciante cristiano de Bonpara (video). Ahora los cristianos viven en constante miedo por las nuevas violencias.
La última agresión contra un miembro de las minorías religiosas de Bangladesh sucedió hoy alrededor de las nueve de la mañana, hora local. El sacerdote es la última víctima de una larga huella de sangre, dejada en estos meses por varios grupos de extremistas islámicos reconducibles a los militantes del califato islámico y de Al-Qaeda.
Desde hace meses que se suceden asesinatos de matriz islámica: activistas, blogger, profesores, pertenecientes a la comunidad LGBT están en la mira por sus ideas liberales. Hace tan sólo dos días, en el pueblo de Bonpara, los radicales asesinaron a Sunil Gomes, de setentaiún años, un cristiano conocido entre los residentes por su compromiso en la iglesia local. El homicidio fue reivindicado por el ISIS y la policía arrestó a Md Sabuj Ali, sospechado de ser el autor.
Stalla Rozario, un vecino de Sunil que fue quien encontró el cuerpo, no logra olvidar a su amigo degollado. Dice a AsiaNews: “No quiero recordarlo, pero mi mente vuelve continuamente a ese momento. Ahora no abrimos siquiera las ventanas de casa, y cerramos la puerta antes de que anochezca. Tenemos miedo”.
Como él, también otros cristianos de Bangladesh temen por su vida. Una mujer del mismo pueblo, anónima por motivos de seguridad, afirma: “¡Quién nos garantiza la seguridad” Apenas vemos a una persona nueva alrededor, ya nos sentimos inseguros”.
El p. Bikash Rebeiro, párroco de Bonpara, refiere: “Agentes de policía fueron colocados como guardias de la iglesia, pero nosotros no queremos vivir con esta guardia y bajo vigilancia. Queremos vivir en un país libre y queremos que a todos sean garantizada la seguridad contra los fundamentalistas”.
El párroco agrega que el “gobierno debería ser más duro con los grupos que intentan destruir la paz”. Mons Gervas Rozario, obispo de Rajshhi, se queja: “Los cristianos estamos en peligro. No es aceptable que tengamos que sentirnos inseguros”.
Atención: estas imágenes pueden herir la sensibilidad de los lectores.
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