Derrumbe en Bombay: 18 muertos. La iglesia de St. Jude organiza las tareas de socorro (Video y Fotos)
de Nirmala Carvalho

Un muro colapsó en el vecindario de Malad East. La iglesia se encuentra al lado del lugar de la tragedia. Los católicos de toda la diócesis han ofrecido su ayuda, tanto económica como en la distribución de artículos de primera necesidad. 

 


Bombay (AsiaNews) – Al menos 18 personas muertas y 50 heridas, es el saldo tras el derrumbe de un muro en Malad East, un vecindario ubicado en la periferia de la ciudad de Bombay, en dirección al norte. El derrumbe sucedió ayer y se debió a las incesantes lluvias que azotan la gigantesca ciudad india desde hace días. En diálogo con AsiaNews, el Pbro. Warner D’Souza, que guía la pequeña iglesia de St. Jude, cuenta: “Nos movilizamos enseguida. En mi teléfono recibí entre 300 y 400 mensajes de los feligreses, poniéndose a disposición para ayudar a los heridos”.  

La última víctima del colapso fue una niña de 12 años, que quedó atrapada entre los escombros y fue rescatada sin vida esta mañana. La imagen de la ciudad ha cambiado por completo en los últimos días: calles inundadas, trenes suspendidos, comunicaciones interrumpidas. Las lluvias han provocado, en total, cerca de 30 víctimas. Finalmente, hoy se prevén precipitaciones intermitentes, que debieran atenuarse hacia la noche. 

El Padre D’Souza cuenta que “la iglesia de St. Jude se encuentra justo al lado del muro que se derrumbó. Enseguida nos dimos cuenta de lo sucedido y todos los feligreses, cerca de 800 personas, se pusieron inmediatamente a la obra. Auxiliamos a los sobrevivientes, trasladamos a los heridos al hospital y dimos dinero directamente a las personas. La respuesta de los fieles ha sido maravillosa”. 

Todos los sacerdotes de la arquidiócesis de Bombay, continúa, “me han enviado dinero a título individual, además de ofrecer el apoyo económico a través de sus iglesias. He recibido llamadas telefónicas de toda la arquidiócesis, poniéndose a disposición para brindar su apoyo”.

En los minutos posteriores a la tragedia, el sacerdote logró alertar a la parroquia cercana, Nuestra Señora de Lourdes, “que vino a socorrernos con sus jóvenes y grupos de oración”. Esta mañana, concluye, “cerca de las cinco y media, distribuimos nuevamente comida, paraguas, linternas eléctricas e impermeables. Luego continuaremos con la colecta de alimentos”.