Seúl, Card. Yeom sobre el aborto: Rechazar la cultura y la tentación de la muerte

La Corte Constitucional ha establecido que una prohibición absoluta es contraria a la Carta Magna y ha solicitado una modificación de la ley.  En su mensaje pascual, el arzobispo de Seúl expresa temor por las consecuencias que ello podría tener en el tejido social del país: “Una nación tiene la responsabilidad de proteger la vida y la seguridad de su pueblo en todas las circunstancias”.  


Seúl (AsiaNews) –  A pesar de los distintos obstáculos y dificultades sociales, los cristianos deben rechazar enérgicamente la cultura y la tentación de la muerte. Es lo que afirma el Card. Andrew Yeom Soo-jung (foto), arzobispo de Seúl, al comentar la última sentencia de la Corte Constitucional en materia de aborto. El 11 de abril pasado, el tribunal estableció que una prohibición absoluta es contraria a la Carta Magna y ha solicitado una modificación de la ley que permita en parte la legalización de la práctica, en la etapa inicial de la gestación. En su mensaje pascual, el Card. Yeom reafirma la doctrina católica en defensa de la vida y expresa temores por las consecuencias que la sentencia podría tener en el tejido social del país.

En su carta, que será leída en todas las parroquias de la arquidiócesis durante la vigilia de Pascua, el Card. Yeom afirma estar “preocupado por la reciente decisión sobre la constitucionalidad de la prohibición del aborto y porque ello pueda conducir a una atmósfera general que lleve a descuidar la vida en la sociedad coreana”. El arzobispo subraya: “Una nación tiene la responsabilidad de proteger la vida y la seguridad de su pueblo en todas las circunstancias. Toda vida, desde momento de la concepción, debiera ser protegida como ser humano y tutelada en toda su dignidad”.   

El prelado exhorta a los legisladores a preparar atentamente la enmienda de la ley actual; invita a los fieles a ser los primeros en optar por la vida en vez de por la muerte, y agrega: “Nosotros, siendo pueblo de Dios, debemos servir y sacrificarnos por la vida de una manera concreta. En medio de los variados obstáculos y dificultades sociales, los cristianos debemos rechazar enérgicamente la cultura y la tentación de la muerte”. “Cuando nosotros mismos comencemos a elegir, respetar, y respetar cada vida tal como es, seguramente seremos capaces de experimentar al Señor resucitado que vive aquí, con nosotros”.

En los últimos días, el debate en torno a la interrupción del embarazo ha vuelto a dividir a la opinión pública surcoreana. Algunas organizaciones feministas y médicas han recibido favorablemente la decisión de la Corte Constitucional. Estas sostienen que la ley actual limita los derechos de autodeterminación de las mujeres. Las comunidades religiosas expresan su descontento y consternación por el veredicto, afirmando que este viola el derecho a la vida de los niños por nacer.

El movimiento pro-vida cuestiona algunas justificaciones citadas por la Corte para emitir la sentencia. Entre ellas, hay una que afirma: “Los embriones dependen completamente del cuerpo de la madre para su supervivencia y desarrollo, por ende, no se puede concluir que sean seres vivientes separados e independientes que puedan tener derecho a la vida”.