Misionero en Mindanao: Que desde Christchurch nazca el espíritu de ‘fraternidad humana’

El p. Sebastiano D’Ambra, PIME, es el fundador de Silsilah, movimiento para el diálogo islamo-cristiano. El sacerdote se inspira en el atentado en Nueva Zelanda para compartir “una reflexión”. “Mi compromiso por la paz y el diálogo, nacido de la violencia que  encontré en Mindanao”.

 


Zamboanga (AsiaNews) – No obstante la consternación y el dolor, la locura homicida de Christchurch puede empujar a las personas a la justa dirección, o sea hacia un nuevo espíritu de “fraternidad humana”. Es la esperanza expresada por el p. Sebastiano d’Ambra (Foto), misionero del Pontificio Instituto Misiones Extranjeras (PIME), desde hace más de  40 años presente en Mindanao, en el sur de Filipinas. El sacerdote es fundador de Silsilah, movimiento para el diálogo islamo-cristiano y es secretario ejecutivo de la Comisión para el diálogo interreligiosos de la Conferencia episcopal filipina (CBCP).

En una carta abierta, el misionero se inspira en la tragedia en Nueva Zelanda de Christchurch para compartir “una reflexión”, sobre la base de su experiencia personal y sobre cuanto maduró a través de Silsilah. “Uno de los motivos por el cual desde 1977 inicié abrazando la misión de diálogo y paz en Mindanao- continúa a partir de 1984 con el movimiento- está radicada en la situación de violencia que experimenté a mi llegada a la isla”. “Era el tiempo en el cual el Moro National Liberation Front (MNLF) [grupo islamista rebelde] llevaba a cabo una guerra y allí asistí a las terribles consecuencias de aquel conflicto en mi primera misión en Siocon, Zamboanga del Norte. Miles de personas fueron evacuadas. La pobreza y el odio eran visibles e iniciaba la terrible venganza de los ‘llaga’, un grupo de cristianos que reaccionaban matando a musulmanes”

En Mindanao, el prejuicio caracterizaba la convivencia entre las comunidades cristianas e islámicas. “Me dije: ‘Si esta es la situación, debo hacer más en el camino del diálogo para compartir mi amor hacia el prójimo, comprendidos los hermanas y hermanos musulmanes- cuenta el p. D´Ambra-. En vez de desalentarme, esta realidad me dio más determinación: inicié viviendo en un pueblo musulmán y luego ofrecer mi contribución para el proceso de paz con el MNLF. Por dos años iba a menudo a los bosques de Siocon, para encontrarme con los rebeldes en calidad de negociador. Eran mis amigos, algo que sorprendía mucho a los cristianos. Los respetaba, si bien sabían que yo estaba contra toda forma de violencia”.

Durante el tiempo pasado entre los rebeldes, un episodio marca el recorrido del misionero: “Un día, un joven miembro del MNLF me dijo: ‘Padre, esta es la lógica de la revolución’: tenemos que matar a muchas personas, para atraer la atención sobre nuestra misión’. Escuché rezando en silencio… Aquella triste historia era una ulterior razón para dedicar mi vida al diálogo y la paz. Me dije. ‘Si existen aquellos que arriesgan la vida por una misión llevada adelante con la violencia, ¿por qué no podemos tener la misma determinación en nombre del diálogo y la paz? ¿Cómo podemos decir al mundo que el amor es más fuerte que el odio?’. Estas y similares reflexiones me llevaron a invitar a las personas, en particular a los musulmanes y cristianos de Mindanao, a seguir el camino de la paz y promover la Cultura del Diálogo”.

El p. D´Ambra concluye su reflexión citando otro acontecimiento, que en las últimas semanas atrajo la atención de la comunidad internacional. “Esta vez es mucho más positivo- afirma-. Es el encuentro en Abu Dhabi entre el Papa Francisco y el Gran imán de Al-Azhar, Ahmad Muhammad Al-Tayyib, el 3 de febrero. En aquella ocasión ambos líderes han donado al mundo el bellísimo ‘Documento sobre la fraternidad humana para la paz mundial y la convivencia común’”. En el texto hay muchas ideas sobre las cuales la humanidad necesita reflexionar”. El misionero cita un pasaje en particular, la invitación del pontífice y del imán a “adoptar la cultura del diálogo como camino; la colaboración común como conducta; el conocimiento recíproco como método y criterio”.