En la isla de Negros, los obispos salen en defensa del ambiente: No a la central de carbón

“Trabajemos juntos para lograr el acceso a la energía limpia, renovable y sostenible”. La planta, un emprendimiento de la SMC Global Power Holdings Corp., prevé una capacidad de 300 megavatios. Los prelados advierten a la población acerca del impacto social, ambiental y sanitario que implicaría su instalación. 


Ciudad de Bacólod (AsiaNews/Agencias) – Los obispos de Negros, la isla situada en el archipiélago de las Bisayas, llaman a la unidad de la población local para hacer frente a la construcción de una central eléctrica a carbón, que sería instalada en la ciudad de San Carlos (Negros Occidental). Es cuanto surge de la declaración conjunta publicada hoy, que lleva la firma de Mons. Gerardo Alimane Alminaza, obispo de San Carlos; Mons. Patricio Abella Buzon (foto), obispo de Bacólod; Mons. Julito Buhisan Cortes, obispo de Dumaguete; Mons. Louie Patalinghug Galbines, obispo de Kabankalán.

La planta, una iniciativa del grupo empresario SMC Global Power Holdings Corp., prevé una capacidad global de 300 megavatios. Los prelados levantan el dedo acusador contra “el fantasma oscuro de los combustible fósiles” que “agravan los cambios climáticos, constituyendo una amenaza para los recursos, el ambiente, la salud y el desarrollo sostenible”.  “Trabajemos juntos –declaran- para aumentar el acceso a la energía limpia, renovable y sostenible.  Afirmemos nuestro compromiso para la tutela del ambiente y para un proceso de desarrollo limpio, que dice no al carbón, y sí a las tecnologías de energía renovable, que son accesibles a todos”.

Los obispos recuerdan las directivas del Grupo inter-gubernamental sobre cambio climático de las Naciones Unidas (ONU), respecto a la gradual eliminación de los combustibles fósiles antes del año 2050. Por otra parte, ellos sugieren que la construcción de una central a carbón requeriría muchos años y millones de pesos, exponiendo al país a nuevas y mayores deudas. A ello se suma su riesgoso impacto social, ambiental y sanitario. “Permanezcamos unidos en Negros –exhortan los prelados- para oponernos a cualquier nueva central eléctrica a carbón y para eliminar gradualmente aquellas que aún se encuentran funcionando”.

Mons. Alminaza, Mons. Buzon, Mons. Cortes y Mons. Galbines concluyen su llamamiento citando el discurso pronunciado por el Papa Francisco en un encuentro con directivos de empresas del sector energético, el 9 de junio pasado: “La positiva perspectiva a futuro de una energía para todos –declaró el pontífice en esa oportunidad- no puede conducir a una indeseable espiral, cada vez más grave, de cambios climáticos, mediante una temible elevación de las temperaturas en el planeta, condiciones ambientales más duras y el aumento de los niveles de pobreza”.